Una delegación del Equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Alhaurín de la Torre, acompañada por varias familias de nuestro municipio, ha regresado recientemente de una visita a Nueva Iberia, ciudad del Estado de Luisiana, Estados Unidos, con la que está hermanada desde 2009. Este viaje ha fortalecido los lazos entre ambas comunidades, que comparten un vínculo especial desde que los primeros colonos alhaurinos llegaran a la región en el año 1779, y ha servido para devolver la estancia de invitados norteamericanos en nuestra localidad en la pasada Semana Santa.
En este viaje a tierras estadounidenses, el alcalde, Joaquín Villanova, y el concejal de Economía y Hacienda, también investigador de aquel importante episodio histórico del siglo XVIII, José Manuel de Molina, han tenido el privilegio de conocer a destacadas figuras locales, incluyendo al senador estatal de Luisiana, Blake Miguez; la cónsul María Teresa García y el alcalde, Freddy Decourt. No obstante, en palabras del propio Villanova, "lo que más nos ha impresionado es la hospitalidad extraordinaria de los residentes de Nueva Iberia, porque desde el momento en que llegamos, fuimos recibidos con los brazos abiertos y con una calidez que nos hizo sentir como en casa".
El máximo mandatario de Alhaurín de la Torre ha querido destacar especialmente la labor de la comisión ciudadana encargada de la organización del Festival Español de Nueva Iberia, y especialmente a su presidenta Brinkley Segura, quien estuvo en nuestro municipio hace algunas semanas. Se trata de un evento que ha ido creciendo en popularidad año tras año en todo el estado de Luisiana. Este festival constituye una celebración vibrante de la cultura española, donde los participantes muestran un profundo orgullo por sus raíces y una pasión por compartir su herencia con otros.
Una de las experiencias más memorables del viaje fue la participación en acciones culturales, como una clase de baile flamenco y un concierto de música española. Estas actividades, dirigidas por talentosos artistas locales y acompañadas por la orquesta de Nueva Iberia, recibieron una gran acogida y agradecimiento por parte de la comunidad.
Además, durante la visita, la comitiva oficial exploró las oportunidades de intercambio cultural y educativo entre ambas ciudades, algunas de las cuales se hicieron varias veces, pero fueron interrumpidas a causa de la pandemia. En este sentido, Villanova ha querido avanzar que muchas familias de Nueva Iberia están ansiosas por recibir a estudiantes de Alhaurín de la Torre para que éstos aprendan inglés y sumergirse, así, en la cultura local. "Estamos seguros de que este intercambio será enriquecedor para ambas partes y fortalecerá aún más nuestros lazos de amistad", agrega el regidor.
En conclusión, "nuestra visita a Nueva Iberia ha sido una experiencia inolvidable gracias a la generosidad y hospitalidad de sus habitantes. Estamos emocionados de continuar fortaleciendo nuestra relación con esta vibrante comunidad y esperamos futuros intercambios culturales que enriquezcan nuestras vidas y promuevan la comprensión mutua", concluye.
Desarrollo de las actividades
En el desarrollo de las actividades, el alcalde de la localidad norteamericana, Freddie DeCourt dio la bienvenida en el Ayuntamiento mostrando el Salón de Plenos. En él se puede ver una zona dedicada a Alhaurín de la Torre donde tienen entre otros objetos el documento firmado con el hermanamiento en 2009, la bandera de Alhaurín de la Torre y distintos obsequios que recibió la alcaldesa de entonces, Hilda Curry, como es el obsequiado por la Cofradía de la Vera+Cruz.
En las intervenciones de ambos alcaldes, el de Nueva Iberia agradeció la presencia de tan importante grupo de alhaurinos, 18 en total, el mayor grupo hasta ahora, presentando como noticia que a partir de ahora las calles del municipio norteamericano estarán rotuladas en inglés, francés y español.
La incorporación de nuestro idioma en los paneles de información de monumentos comenzó ya hace unos años, pues a pesar de ser fundada la ciudad por malagueños y alhaurinos en 1779, la influencia de la cultura francesa había tapado este hecho.
Por su parte, Joaquín Villanova agradeció la bienvenida y el apoyo que el Ayuntamiento de Nueva Iberia presta a la Asociación Española que organiza el festival anual que ha cumplido su décima edición.
Posteriormente, el regidor norteamericano organizó un despliegue con parte del mejor equipamiento de la policía local y bomberos municipales, incluyendo una tanqueta de los SWAT con armamento pesado.
Igualmente, durante el resto de días se giró visita al museo local, el Bayou Teche Museum, y al techo de croché que están elaborando, a imitación del bordado realizado desde hace varios años en Alhaurín de la Torre. No faltó la celebración de una misa en la iglesia católica de San Pedro, en la que se rogó por las almas de los malagueños que fueron fundadores de la ciudad americana en 1779. En ella participaron descendientes de aquellos pioneros y un grupo de recreación histórica que llaman Caballeros de Colón.