Agentes de la Policía Nacional han detenido a una vecina de Almería, como presunta autora de un delito de Homicidio, cinco delitos de robo con violencia, cuatro delitos de lesiones graves, un delito de tenencia ilícita de armas, un delito de estafa y un delito de hurto.
La investigación se inició en marzo de 2023, cuando los investigadores tuvieron conocimiento, a través de múltiples denuncias, de que una mujer que se hacía pasar por asistente domiciliaria, tras ganarse la confianza de distintos varones dependientes de avanzada edad, les confundía para hacerse con el dinero y los objetos de valor que encontraba en sus viviendas.
La detenida es una delincuente habitual que se había especializado en el hurto gerontológico en sus diferentes versiones:
En ocasiones, acompañada de una cómplice, llamaba a la puerta del domicilio de su víctima y manifestando que conocía a algún vecino, buscaba excusas como pedir un vaso de agua o acudir al aseo para registrar el domicilio buscando dinero u objetos de valor.
Con el paso del tiempo la detenida comenzó a actuar en solitario perfeccionando su modus operandi. Consiguió el uniforme de una conocida empresa de ayuda a domicilio y haciéndose pasar por asistente social, se ganaba la confianza de las víctimas para merodear por sus casas y hacerse con cualquier cosa de valor que encontrara.
Finalmente decidió incluir medicamentos en su proceder. Con la excusa de compartir un café o un refresco, la detenida mezclaba barbitúricos en las bebidas de sus víctimas para aturdirlas y poder registrar las casas con tranquilidad. Resulta significativo que esta mujer no tenía conocimiento alguno sobre las sustancias que administraba o las dosis oportunas, poniendo en grave peligro la vida de los ancianos.
Los familiares de las víctimas o los trabajadores autorizados para su cuidado los encontraban inconscientes o moribundos, y todos ellos requirieron de atención e ingreso hospitalario. Tras el pertinente examen toxicológico se concluyó que todas las víctimas resultaron intoxicadas por benzodiacepinas, medicación que ninguno tenía prescrita según la historia clínica de los pacientes.
Ante tales hechos, la Brigada de Policía Judicial de la Comisaría Provincial de Almería, coordinando los distintos grupos que la confortan, inició una compleja investigación para identificar y localizar a la autora de lo sucedido. Mientras proseguían con las pesquisas, los agentes tuvieron conocimiento de la muerte de la última víctima a causa de la ingesta masiva de benzodiacepinas y metadona. Sin embargo el anciano había llegado a reconocer fotográficamente a la arrestada antes de perder el conocimiento.
Una vez identificada la presunta autora, los grupos de Homicidios, Hurtos y Blanqueo de capitales de la Brigada Provincial de Policía Judicial, en coordinación con el Juzgado de Instrucción N.º 5 y la Fiscalía de Almería, procedieron a relacionar todos los hechos conectados con la detenida, consiguiendo localizarla días después.
Los investigadores efectuaron dos registros domiciliarios en los que se intervinieron 22.385 euros en efectivo, numerosas joyas, una ingente cantidad de medicamentos depresores del sistema nervioso, recetarios de medicamentos, facturas de establecimientos de compra-venta de oro, un supuesto contrato de donación de 20.000 euros, diversos teléfonos móviles y libretas bancarias a nombre de terceros en las que se pudo verificar la existencia de múltiples transferencias y reintegros en efectivo de grandes sumas de dinero.
En un de los registros, también se intervino gran cantidad de comprimidos preparados para su ocultación en cavidades corporales, un arma de fuego, munición y un chaleco antibalas.
La Policía mantiene abierta la investigación en busca de otras posibles víctimas, ya que la detenida llevaba años dedicándose a esta actividad.
El Juzgado de Instrucción N.º 6 de Almería decretó el ingreso en prisión de la detenida, que sumaba múltiples reseñas por hechos similares.