La alcaldesa de Teruel, Emma Buj, y el secretario general de la Subdelegación del Gobierno en Teruel, Enrique Gómez Moreno,y el delegado del Gobierno de Aragón, Benito Ros, han copresidido este viernes la Junta Local de Seguridad de Las Bodas de Isabel, en la que se han analizado los últimos detalles para garantizar la seguridad en esta fiesta que llenará las calles de la capital con unos 100.000 turolenses y visitantes del 15 al 18 de febrero.
El 100% de los efectivos de la Policía Local, de la Policía Nacional y de la Guardia Civil estarán operativos los días claves de la fiesta, del viernes 16 al domingo 18 de febrero. En concreto estarán activados 48 agentes de la Policía Local, 100 de la Guardia Civil y otro centenar de la Policía Nacional, cuerpo este último que se reforzará con agentes de otras unidades especiales procedentes de Zaragoza y Valencia.
En lo que respecta a la Policía Nacional, los servicios contarán con una unidad especial de delitos contra la propiedad, una unidad de prevención y reacción para garantizar la seguridad en los actos multitudinarios y una unidad de dones y antidrones. De esta última unidad, el secretario de la Subdelegación del Gobierno ha advertido que se va a cerrar el espacio aéreo turolense y que si alguna empresa de audiovisuales con intención de grabar la fiesta o algún particular que quiera sobrevolar algún dron los días de las Bodas, deberá pedir permiso y autorización a la Subdelegación del Gobierno dado que si se intercepta alguno sin permiso se le obligará a aterrizar y se le impondrá la sanción correspondiente. Gómez Moreno ha explicado que la finalidad de despegar la unidad de los drones es para geolocalizar cualquier incidencia que pueda ocurrir en los actos de mayores aglomeraciones.
La Policía Nacional también contará con guías caninos para detectar estupefacientes y drogas y un helicóptero que sobrevolará la ciudad.
Por parte de la Guardia Civil , el Seprona controlará que todos los animales que se exhiben cuentan con el permiso preceptivo y el subsector de tráfico intensificará la vigilancia en los accesos a la ciudad, con controles de alcoholemia y control de drogas y detección de armas blancas en las Nacionales 420, 330 y 234. El Pegasus sobrevolará la servidumbre de Teruel desde las alturas y la unidad fiscal y de fronteras vigilará todos los puestos e intervendrá también las armas de fuego, espadas, navajas y pirotecnia que carezca de autorización.
Ante el amplio dispositivo de seguridad que se pone en marcha con motivo de las Bodas de Isabel, la alcaldesa de Teruel, Emma Buj ha dicho que "nos ponemos en lo peor para que pase lo mejor" y ha insistido que se trata de una fiesta "especialmente tranquila y extraordinariamente segura".
La alcaldesa ha señalado que el Ayuntamiento despliega toda su intendencia en infraestructuras y todo el operativo de la Policía Local y protección civil para garantizar la seguridad de los turolenses con algunos focos de especial atención como los festejos taurinos y la carpa de los Planos.
Buj se ha mostrado confiada en que esta edición sea un nuevo éxito y ha subrayado que aunque es un fiesta compleja por el amplio despegue de escenarios y recursos que requiere, por otro lado es una fiesta tranquila por el perfil de personas que participa en ella.
El delegado del Gobierno de Aragón, Benito Ros, ha destacado la buena sintonía entre las administraciones para colaborar en la fiesta y ha señalado que desde el Gobierno de Aragón se intensifica estos días el trabajo en materia de sanidad, realizando inspecciones en los puestos ambulantes de venta de alimentación para garantizar la calidad. También se refuerza el centro de salud del Ensanche así como los servicios del Hospital Obispo Polanco. En materia de Interior también se controla que los festejos taurinos cumplen con todas las disposiciones en vigor.