Este viernes por la mañana la consejera de Bienestar Social y Familia, Carmen Susín, ha visitado la ciudad de Teruel, donde ha sido recibida por su alcaldesa, Emma Buj, en el Consistorio junto a Juan Carlos Cruzado, primer teniente de alcalde; el segundo teniente de alcalde, Carlos Méndez; el concejal Eduardo Suárez y la concejala responsable de Servicios Sociales, Carmen Romero; también han asistido Joaquín Juste, presidente de la Diputación Provincial de Teruel; Jesús Fuertes, diputado autonómico por Teruel en las Cortes, y Benito Ros, delegado territorial del Gobierno de Aragón, entre otras autoridades.
Tras la recepción y la firma en el Libro de Honor, Susín ha dado lectura al manifiesto institucional por el Día Internacional de la Mujer que se ha desarrollado sobre las 11.00 horas en la Plaza del Torico. A continuación, se han trasladado al centro de inserción sociolaboral situado en el antiguo colegio de San Nicolás de Bari que gestiona Cáritas y que la Consejera ha podido conocer de la mano de su director, Juan Marco.
La consejera Susín se ha referido, al igual que la alcaldesa Buj, a la futura residencia de estudiantes Luis Buñuel, cuya licitación está prevista para finales de este mismo año, lo que supone un paso más para que la primera fase sea una realidad "cuanto antes". Ambas han trasladado además su reconocimiento a la importante labor de Cáritas, parte de la sociedad turolense y el Gobierno de Aragón, y Susín ha recordado cuál es el escenario al que se enfrenta la ayuda alimentaria en los próximos meses con la implantación esta primavera de tarjetas monedero una vez que el Fondo Social Europeo Plus (FSE+) reemplace con ese sistema la entrega directa de alimentos.
"Nos preocupa la situación en la que van a quedar miles de familias aragonesas", ha aseverado la Consejera: "Sólo el Banco de Alimentos en Teruel está repartiendo de forma directa a 1.500 familias y en Aragón sólo 700 familias como máximo van a entrar a partir de ahora en ese reparto". De acuerdo con los datos del Gobierno de Aragón, unas 9.200 familias eran hasta ahora beneficiarias de estas ayudas a través de iniciativas como el antiguo programa básico de alimentación y otras acciones de urgencia. A esa estimación habría que añadir al grueso de personas vulnerables que accedían al programa del FSE+ en comedores sociales, centros sociosanitarios que atienden a personas en exclusión social, personas sin hogar y migrantes sin papeles: todos estos colectivos quedan fuera del reparto de tarjetas monedero.
Esto es así porque, tal y como ha explicado Carmen Susín, esas tarjetas –gestionadas por Cruz Roja a nivel nacional en un primer momento y a partir de 2025 por las CCAA– se van a destinar a familias vulnerables con hijos menores a cargo, dejando fuera a muchos otros perfiles. En Aragón, ha lamentado Susín, esos cambios en los criterios para acceder a estos vales supondrán que atender a tan sólo unas 700 familias en toda la Comunidad, aquéllas que tengan al menos un menor entre sus miembros e ingresos inferiores al 40% de la mediana de la renta; esto es, 7.730 euros/año o 644 euros/mes.
Para poner en marcha este sistema, Cruz Roja ha recibido una subvención directa de 100 millones de los que 95 se destinarán a la compra de alimentos en una serie de puntos de venta aún por determinar, dado que la licitación aún está pendiente. Los destinatarios de las tarjetas podrán usarlas para adquirir alimentos y artículos de higiene como jabón, champú y pasta de dientes. El valor monetario de estas ayudas a familias con al menos un menor a cargo es de 130 euros para 2 personas, 160 euros para 3 personas, 190 euros para 4 personas y, como máximo 220 euros para 5 personas o más, todas ellas con una validez de 12 meses.
Cáritas Teruel: atención, formación e inclusión
Los proyectos más destacados que impulsa Cáritas Teruel en este espacio están relacionados con la atención básica y con la inclusión laboral: por un lado, se encargan de una primera acogida a personas y familias en situación de vulnerabilidad que necesitan de apoyos y una solución habitacional, para lo que disponen de 8 viviendas, y por otro se ofrecen oportunidades de formación e itinerarios de inserción laboral que en 2023 llegaron a entre 80 y 100 personas.
Con el estallido de la crisis de Ucrania en estas instalaciones se llegaron a alojar 30 desplazados de ese país; además cuentan con otros 6 alojamientos disponibles para personas que necesiten contar con una vivienda de forma temporal, como pueden ser vecinos de localidades de fuera de Teruel que estén acompañando a un familiar convaleciente o enfermo que esté recibiendo tratamiento en la capital.
En ese mismo edificio Cáritas dispone de una empresa de inserción dedicada a la ropa, que cubre el proceso desde la recogida al almacenaje, la lavandería y la venta; también se dedican al comercio justo y refuerzan con su actividad al resto de recursos de apoyo que tiene la entidad en Teruel, como el albergue municipal, y también en Alcorisa.
La visita a Teruel de la Consejera ha finalizado con un recorrido por las dependencias de la Dirección Provincial del Instituto Aragonés de Servicios Sociales junto a su directora, Nuria Alegre, y los profesionales del centro.