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Ayer se renovó el Consejo Municipal de la Infancia y la Adolescencia de Teruel, que preside la alcaldesa, Emma Buj, y que lo integran 30 chavales de distintas edades que representan y dan la opinión de los niños y niñas de Teruel en los asuntos que les afectan dado que, aunque son menores de edad, también tienen sus derechos, preocupaciones, gustos e inquietudes.
Inés, Marina, Carlos, Alejandro… hasta 14 integrantes del Consejo intervinieron ayer en su primera comparecencia ante la alcaldesa de Teruel, Emma Buj, la concejal de Juventud, Lucía Gargallo y un representante de cada uno de los grupos municipales en el Ayuntamiento de Teruel que también forman parte del Consejo de Infancia y Adolescencia.
En el último pleno celebrado por el Consejo, la alcaldesa les encargó un trabajo en el que relatasen ideas para reducir la huella de carbono. Con los trabajos bien hechos, ayer presentaron lo que han denominado "el metrominuto", un mapa que calcula el tiempo que cuesta ir andando de un lugar a otro en Teruel y que lo han distribuido en seis rutas diferentes. La Ruta Divertida que une los parques infantiles; la Escolar que conecta los centros educativos; la Activa que une las máquinas biosaludables; la Cultural que encadena los centros socioculturales; la Patriominial, un recorrido por los espacios de valor histórico y la Ruta de la Salud y los Cuidados que enlaza los centros de salud.
Aprovecharon, eso sí, para plantear algunas reivindicaciones al Ayuntamiento como que se mejoren algunas aceras, se pinten más pasos de cebra, se potencie el uso de bicis y patines o se refuerce la seguridad en las salidas de los institutos. Además, pidieron que se cuiden los parques y jardines, que se amplíe la oferta de ocio a personas con discapacidad y que se construyan más instalaciones en los barrios rurales y más canchas deportivas en la ciudad, entre otras cosas.
La alcaldesa aplaudió el buen trabajo elaborado por los niños con la presentación del "Metrominuto" y fue contestando a cada una de las peticiones argumentando que el Ayuntamiento ya trabaja en ellas y poniendo como ejemplo la reciente reforma de todas las aceras de las rondas y de la avenida de Aragón, la próxima construcción de un carril de vehículos de movilidad personal desde Dinópolis hasta la Universidad o la inmediata construcción de una piscina climatizada accesible en la zona de los Planos, además del pabellón de la Fuenfresca, la reforma del polideportivo Las Viñas-Pepe Lanzuela o la del Palacio de Exposiciones y Congresos, entre otras.
Vista la buena respuesta al encargo que les hizo en el último pleno, la alcaldesa les mandó dos nuevos trabajos. El primer encargo que ayuden al Ayuntamiento a detectar los puntos más sucios y en los en los más papeleras hacen falta para lograr una ciudad más limpia. El segundo encargo lanzado por Buj fue que elaborasen un documento con las instalaciones deportivas que más echan en falta y más les gustaría tener en Teruel.
Para finalizar la sesión, la alcaldesa y la concejal de Juventud, impusieron una pequeña insignia a cada uno de los nuevos miembros en el Consejo de Infancia y Adolescencia y se despidieron hasta el próximo encuentro no sin antes hacerse todos juntos una fotografía en las escaleras del Ayuntamiento.
El pleno de este consejo se reúne como mínimo una vez al año con todos sus miembros, y el grupo de infancia y adolescencia, principal protagonista de este órgano participativo, está acompañado por la técnico de juventud del Ayuntamiento, Belén Ariño.
Además, tiene el apoyo de las instituciones vinculadas con la infancia y adolescencia de la ciudad. Se trabaja siempre con metodologías, lenguajes y fórmulas adecuadas a la infancia, a los asuntos de interés y a los integrantes del consejo para favorecer su participación e implicación. En esta línea, las reuniones se realizan en el Centro de Ocio Joven de la Plaza Domingo Gascón, un espacio familiar para los miembros del consejo.
Las reuniones se convocan cada seis meses con carácter ordinario, y se pueden celebrar sesiones extraordinarias siempre que sea necesario, a propuesta del presidente o de al menos un tercio de los representantes de este consejo municipal.
Las decisiones que se adoptan en el grupo de trabajo de infancia y adolescencia se ponen en conocimiento del pleno del consejo para que, en su caso, formalmente presente a los órganos municipales correspondientes las iniciativas y propuesta que consideren.
Los niños y adolescentes se mostraron ayer muy orgullosos de pertenecer a este consejo para ayudar a mejorar la ciudad y expresaron su disponibilidad para aportar ideas e iniciativas, añadiendo que se lo pasan muy bien en el consejo, pero que también tienen que trabajar.
Teruel cuenta desde julio de 2016 con un Plan Municipal de Infancia y Adolescencia y fue reconocida por UNICEF como Ciudad Amiga de la Infancia. Este consejo se constituyó por primera vez en noviembre de 2014.
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