Agentes de la Jefatura Superior de Policía de Aragón detuvieron a un hombre de 33 años de edad, como presunto responsable de un delito dos delitos de hurto y otro de estafa.
El primero de los hechos se produjo a principios de febrero en un local comercial de la Plaza Salamero, cuando un hombre, aprovechando que las empleadas estaban ocupadas, se coló en la trastienda y se apoderó de dos carteras que estarían guardadas en las taquillas.
Entre los efectos sustraídos se encontraba dinero en efectivo y también varias tarjetas que utilizó posteriormente para consumir en diferentes bares y restaurantes, máquinas de vending e incluso sacarse bonos del tranvía.
Unos días más tarde, este mismo hombre acudió a un centro de estética de la avenida Francisco de Goya y con el pretexto de que tenía una cita para su mujer, mientras la empleada lo comprobaba, éste se coló en el almacén y sustrajo un bolso que también guardaba en la taquilla.
Los agentes del Grupo de Judicial de la Comisaría Centro fueron los encargados de las pesquisas no tardando en averiguar quién era el autor, un hombre que suma en su historial delictivo casi una veintena de antecedentes por hechos de la misma naturaleza.
La detención se produjo el pasado 15 de abril, cuando un agente fuera de servicio lo reconoció en la vía pública mientras estaba consumiendo sustancias estupefacientes, por lo que también se le propuso para sanción y se le incautó la droga.
El detenido pasó a disposición de la autoridad judicial, el Juzgado de Instrucción en funciones de guardia, el martes 16 de abril, decretando su titular libertad con cargos.