Agentes de la Jefatura Superior de Policía de Aragón detuvieron el pasado martes 5 de noviembre a un hombre de 43 años como presunto autor de un delito de estafa.
La investigación comenzó tras la denuncia de una mujer de 79 años, usuaria de una residencia de mayores en Zaragoza, quien informó que, desde septiembre, se habían realizado grandes retiradas de dinero de su cuenta y transferencias a terceros sin su autorización.
Las pesquisas, llevabas a cabo por agentes del Grupo de Judicial de la Comisaría de Arrabal, lograron identificar a los beneficiarios de las cuentas a las que transferían cantidades que oscilaban entre los 10 y los 5.000 euros.
Además de las transferencias, presunto estafador habría realizado múltiples retiradas de efectivo en cajeros automáticos, acumulando un total defraudado de cerca de 30.000 euros.
En el curso de la investigación, los policías se centraron en un empleado de la residencia, quien presuntamente habría sustraído la libreta bancaria de la anciana y habría logrado hacerse con el número secreto para poder operar,
Este individuo, que había trabajado en el centro durante varios meses, ya no pertenecía a la plantilla en el momento de la detención.
El detenido fue conducido hasta el Juzgado de Instrucción en funciones de guardia, donde se decretó su puesta en libertad una vez oído en declaración.