La revista Turia, premiada por la Asociación Aragonesa de Críticos de Arte

La revista Turia, editada por el Instituto de Estudios Turolenses (IET) de la Diputación Provincial de Teruel, recibirá uno de los galardones anuales que concede la Asociación Aragonesa de Críticos de Arte. En concreto, este colectivo profesional quiere reconocer la labor de difusión del arte aragonés contemporáneo llevada a cabo durante las más de cuatro décadas de existencia de esta publicación periódica. Una revista con vocación universal y atractivos contenidos culturales inéditos, que se elabora desde la provincia más meridional de Aragón. El acto de entrega de los premios se desarrollará el próximo 15 de marzo, a las 19 h., en el IAACC Pablo Serrano de Zaragoza.

Aunque siempre se ha definido como una revista que pretende ofrecer buenas lecturas a buenos lectores, Turia siempre ha tenido mucho interés en enriquecer sus sumarios no sólo con textos inéditos de calidad. Desde su número 0, publicado en 1983, en el que la portada era obra de José Lapayese (Calamocha, Teruel,1899 - Madrid, 1982) hasta su última entrega editada hasta ahora, el pasado mes de noviembre, que contenía ilustraciones de David Sancho (Pancrudo, Teruel, 1997) la nómina de artistas aragoneses que han publicado su trabajo gráfico es muy amplia y relevante.

Resulta especialmente simbólico que este premio sea entregado en el IAACC Pablo Serrano por cuanto el escultor que da nombre al centro museístico fue el primer artista que apoyó el nacimiento de Turia. Gracias al respaldo de Pablo Serrano (Crivillén, 1908 – Madrid, 1985), el fundador y director de la revista, entonces un joven de 21 años, consiguió el compromiso del Ayuntamiento de Teruel para que se editara el primer número de la hoy prestigiosa revista cultural. Sin duda, aquel episodio confirmaría que, además de su relevancia creativa nacional e internacional, Pablo Serrano mantuvo un generoso y constante apoyo hacia las inquietudes y proyectos culturales que surgieron en su tierra natal. Buena prueba de ello es que, hasta su muerte, formó parte del Consejo Asesor que avaló durante los primeros años la trayectoria de Turia.

En cualquier balance de la creatividad artística que ha promovido Turia hay que subrayar el protagonismo perenne del pintor turolense Gonzalo Tena (Teruel, 1950), premio Aragón Goya 2017. Suyo es el original diseño de la cabecera de la revista, que se mantiene desde su primera entrega. Por otra parte, Tena es el artista que más ocasiones la ha ilustrado y su trayectoria fue también objeto de estudio y divulgación en las propias páginas de esta publicación periódica, a través una valiosa serie de artículos elaborados por el profesor Ernesto Utrillas, de la Escuela de Arte de Teruel.

Para el fundador y director de la revista, Raúl Carlos Maícas, "esa cabecera creada por Tena simboliza muy bien la apuesta permanente de TURIA por la modernidad y acredita la vocación de servir de puente cultural, también a nivel artístico, entre Teruel/Aragón y el resto de territorios y países". Y es que la revista, desde sus orígenes, tiene su difusión nacional e internacional por suscripción.

Junto a Gonzalo Tena, otro de los ilustradores más habituales en Turia ha sido Isidro Ferrer (Madrid, 1963, aunque radicado en Huesca desde hace muchos años). No sólo sus dibujos son siempre los encargados de aportar imágenes a los textos de la sección "La isla" de la revista. También ha realizado en varias ocasiones las ilustraciones de la portada y del conjunto de la publicación. Buena prueba de su consolidado prestigio y de su proyección, la acreditan el doble Premio Nacional de Diseño y de Ilustración que posee. Incluso, Isidro Ferrer ha protagonizado una entrevista a fondo en Turia, en la que declaraba: "Los diseñadores no somos artistas, resolvemos problemas".

La nómina de creadores aragoneses que han ilustrado la publicación es abrumadora y revela la clara apuesta de la revista por artistas de las más diversas tendencias y generaciones. Además de los ya mencionados, citaremos a algunos otros por orden alfabético: Katia Acín, Agustín Alegre, Lara Almércegui, Ángel Aransay, Emilio de Arce, Carlos Barboza, Natalio Bayo, José Beulas, Pascual Blanco, Strudio Brosmind, José Manuel Broto, Alfonso Buñuel, Ricardo Calero, Pepe Cerdá, Julia Dorado, Joaquín Escuder, Jorge Gay, José Gonzalvo, Luis Grañena, Teresa Grasa, Cristina Huarte, Iris Lázaro, Fernando Martín Godoy, Víctor Mira, Fernando Navarro, Rafael Navarro, Gema Noguera, Paco Rallo, Vicente Pascual, Ángel Pascual Rodrigo, Ángeles Pérez, María José Pérez Vicente, Calpurnio Pisón, Charo Pradas, Fernando Romero, Mariano Rubio, Gervasio Sánchez, Óscar Sanmartín, Antonio Santos, Antonio Saura, Carlos Saura, Manuel Sierra Barseló, Fernando Sinaga, Enrique Trullenque, Rubén Vidal, Lina Vila y Juan Zurita.

Si en cada entrega de Turia su contenido estelar son sus exhaustivos y fascinantes monográficos, con un total de 150 páginas de textos inéditos dedicados a un autor y su obra, conviene recordar que hasta ahora son tres grandes artistas aragoneses del siglo XX los que los han protagonizado: Antonio Saura, Víctor Mira y Ramón Acín.

La vida y la obra del oscense Antonio Saura (1930, Huesca – 1998, Cuenca), uno de los artistas contemporáneos españoles de mayor proyección, fue el contenido central del número doble 68-69 de Turia. Era el año de 2004 y, además de material del propio Saura, colaboraron con textos originales nombres tan conocidos en el ámbito de la crítica de arte como Juan Manuel Bonet, Tomás Llorens, Daniel Giralt-Miracle, Fernando Huici, Chus Tudelilla, Óscar Alonso Molina, Federico Torralba, Fernando Alvira o Ernesto Arce. También participaron el mítico editor de Circulo de Lectores-Galaxia Gutenberg, Hans Meinke; el doctor y experto en arte Alberto Portera; los escritores Julián Ríos y Andrés Sánchez-Robayna o la hermana e hija del propia Saura, Ángeles Saura y Marina Saura, respectivamente.

Ramón Acín (Huesca, 1888-1936), uno de los nombres propios del arte de vanguardia y libertario español del siglo XX, fue el principal protagonista del número 120 de la revista cultural. Se trató de un homenaje colectivo que se le rindió con ocasión de celebrarse, en 2016, el 80 aniversario de su muerte. Turia redescubrió así a sus lectores el interés y la vigencia de la creatividad comprometida de un personaje tan único como irrepetible. Un creador de singular trascendencia que, desgraciadamente, fue una de las primeras víctimas de la represión de los sublevados en la guerra civil española.

El amplio y sugestivo monográfico que la revista dedicó a redescubrir al pintor y escritor español Víctor Mira (Larache, Marruecos, 1949 – Breitbrunn am Ammersee, Alemania, 2003) fue coordinado por Chus Tudelilla y constituyó sin duda uno de los contenidos más destacados del número 128 de la revista. Un total de catorce autores, entre los que figuran los principales estudiosos de su obra, nos brindaron las claves de uno de creadores más singulares y controvertidos del arte contemporáneo. Situado por la crítica en la estela de Dalí, Warhol o Joseph Beuys o bajo la influencia de Michaux o Goya, su cruda lucidez y su cultivado malditismo son algunos de los ingredientes que convierten la trayectoria de Víctor Mira en una de las más originales y relevantes del panorama artístico de nuestro país durante el último tercio del siglo XX.

Más allá de los monográficos, en las secciones "Sobre Aragón" y "Cuadernos Turolenses" de Turia, se ha venido publicando un amplísimo y plural conjunto de estudios y aproximaciones divulgativas sobre los mejores artistas aragoneses contemporáneos. Entre ellos habría que citar, por ejemplo, los varios artículos dedicados a Pablo Serrano (escritos por Gonzalo Borrás, Manuel García Guatas y Jesús Rubio Jiménez, entre otros), a Salvador Victoria (por Jesús Cámara y Concha Tejedor), a José Luis González Bernal (por Ricardo Centellas y Manuel Pérez-Lizano), a José Gonzalvo (por Román de la Calle) y a Agustín Alegre (por Marta Marco Mallent).