Agentes de la Jefatura Superior de Policía de Aragón detuvieron en Zaragoza a un hombre de 22 años como presunto responsable de varios delitos de robo con violencia e intimidación con arma de fuego en diferentes establecimientos de juego de la ciudad de Zaragoza y Torrelavega (Cantabria).
La investigación se inició el pasado mes de julio de 2024, cuando agentes del Grupo de Atracos de esta jefatura tuvieron conocimiento de una tentativa de robo con violencia en un salón de juegos de la Avenida América de la capital aragonesa. Los hechos ocurrieron el 30 de julio, cuando una empleada del establecimiento alertó al CIMACC 091 y a través del botón antipánico, sobre la presencia de un individuo armado que intentaba sustraer dinero de la caja registradora y de las máquinas tragaperras. A la llegada de la patrulla de Seguridad Ciudadana, el presunto autor ya había huido del lugar sin lograr su botín.
El pasado 9 de marzo del presente año, se produjo un segundo robo con intimidación con arma de fuego en otro salón de juegos de la Avenida de San José de Zaragoza. En esta ocasión, el atracador accedió al establecimiento sobre las 09:00 horas, extrajo un arma de fuego de su mochila y amenazó a la empleada, obligándola a abrir la caja fuerte y las máquinas tragaperras. En este robo, logró apoderarse de más de 8.600 euros en efectivo antes de darse a la fuga.
Paralelamente, agentes de Policía Judicial de la Comisaría de Torrelavega estaban investigando otro robo con violencia en un salón de juegos de aquella localidad, concretamente en la calle Lasaga Larreta. Allí el amigo de lo ajeno se apoderó de más de 3.500 euros en efectivo.
Gracias a la colaboración entre las diferentes unidades policiales, los agentes pudieron determinar que el responsable de estos hechos era la misma persona, ya que utilizaba el mismo modus operandi en los tres casos, imputándoles en total tres delitos de robo con violencia e intimidación.
Modus operandi
El detenido accedía a los establecimientos a primera hora de la mañana, asegurándose ser el único cliente, mostraba un arma de fuego y amenazaba a las empleadas para que le entregaran el dinero de la caja fuerte y de las máquinas tragaperras. Además, para garantizar tener caudales en las cajas, cometía estos ilícitos en fin de semana. En total sustrajo más de 12.000 euros en efectivo.
El detenido, que cuenta con casi una cuarentena de antecedentes policiales, ha pasado esta mañana a disposición judicial, el Juzgado de Instrucción en funciones de guardia.