Agentes de la Jefatura Superior de Policía de Aragón detuvieron a dos hombres de 42 y 46 años de edad como presuntos responsables de un delito de tráfico de drogas y a otro hombre de 43 años por un delito contra la salud pública.
Las pesquisas, llevadas a cabo por el Grupo de Investigación de Tráfico Minorista de Estupefacientes, se centraron en la detección y análisis de información sobre la venta de drogas a pequeña escala. Como resultado de estas labores, los agentes obtuvieron indicios sobre la existencia de un piso en la calle José Pellicer donde se estarían vendiendo sustancias estupefacientes.
Las primeras indagaciones confirmaron que la vivienda era frecuentada por numerosas personas que permanecían en su interior apenas unos minutos antes de abandonarla rápidamente, un patrón de conducta característico de las transacciones de droga.
Los agentes pudieron determinar que los moradores distribuían varios tipos de drogas, principalmente cocaína y sulfato de anfetamina (SPEED) que provocan un grave daño para la salud.

En la entrada y registro, autorizada por el Juzgado de Instrucción y en compañía del Letrado de la Administración de Justicia, los policías comprobaron cómo los investigados habían arrojado por el balcón una bandolera y una pequeña caja de caudales, cayendo en un tejadillo de la vivienda colindante.
En su interior portaban unos 325 gramos de Speed, 107 gramos de cocaína, 700 euros en efectivo y una pistola de fuego real. Además, en el registro de la vivienda se intervienen varios envoltorios preparados para la venta de Speed, cocaína, marihuana, MDMA y útiles para la elaboración y distribución.
El detenido como presunto autor de un delito contra la salud pública fue puesto en libertad tras declarar en sede policial. Los otros dos detenidos, que suman una cuarentena de antecedentes policiales, pasaron el día de ayer a disposición de la autoridad judicial, quedando en libertad con cargos.