Aragón argumenta la inclusión de la orografía y la despoblación en el nuevo Sistema de Financiación Autonómica

La orografía y la despoblación son clave de bóveda del Gobierno de Aragón para que el Ejecutivo de Pedro Sánchez las considere como parte fundamental en el Sistema de Financiación Autonómica. El Departamento de Hacienda, Interior y Administración Pública del Gobierno de Aragón envió en la noche del lunes un detallado argumentario defendiendo estas dos variables frente a la población de cara a la reforma del sistema de financiación. El consejero Roberto Bermúdez de Castro ha explicado en rueda de prensa las alegaciones presentadas y ha recalcado que "no buscamos ninguna confrontación. Vamos en positivo intentando llegar a un acuerdo".

En este sentido ha señalado su disposición a reunirse con Inés Olóndriz, secretaria general de Financiación Autonómica y Local, para explicarle de forma detallada las alegaciones que presenta Aragón.

El Gobierno de Aragón defiende la necesidad de incluir los costes fijos, la despoblación y la orografía, así como la necesidad de dar un mayor peso a las variables correctivas con el objetivo de cambiar el modelo actual de financiación que ahonda en el desequilibrio de los territorios.

El gasto de Aragón en la prestación de los servicios básicos de sanidad, educación y servicios sociales, según recoge un informe de la Cámara de Cuentas de la comunidad, fue de 2.958 euros por habitante 'ajustado' para el ejercicio de 2022, lo que supuso un déficit de financiación por habitante ajustado de 398 euros.

La insuficiencia de ingresos penaliza de forma constante a Aragón por lo que es necesario corregir el modelo hacía un equilibrio en favor de aquellos territorios y poblaciones que se enfrentan al principal reto demográfico como es la despoblación. De no hacerlo, el informe enviado al Ministerio de Hacienda, subraya que es condenar conscientemente a sus ciudadanos a unos peores servicios o, incluso, a no poder prestarlos.

En la necesidad de dar equilibrio a los territorios y adecuar la financiación a la realidad, a inclusión de los indicadores de la orografía y despoblación son fundamentales para alcanzar una financiación más justa.

La orografía de Aragón –elevada, montañosa y afectada por incidencias climáticas- implica un mayor gasto en creación y mantenimiento de cualquier infraestructura y dificultades para garantizar a todos los ciudadanos la igualdad en la prestación de servicios fundamentales.

El 40% de los municipios de Aragón se engloba en la denominada 'Zonas Desfavorecidas de Montaña'. En el caso de Huesca es algo más del 45% de sus municipios y en el de Teruel casi de un 85%. Además, 25 de los 50 municipios a más altitud de España se encuentran en Aragón y la mayor parte en la provincia de Teruel. El Gobierno de Aragón defiende, que al igual que sucede con la insularidad, la orografía, como accidente geográfico y natural, debe tener su reflejo en el Sistema de Financiación Autonómica.

En cuanto a infraestructuras viarias, en Aragón hay 690 kilómetros de carreteras de montaña y alta montaña -310 en Huesca y 480 en Teruel- que pertenecen a la Red de Carreteras de la Comunidad Autónoma y que conlleva un sobrecoste en tareas de mantenimiento, conservación y reparación.

En el informe que avalan las alegaciones del Gobierno de Aragón se argumenta que es evidente que la distribución de la población en el territorio no son meras variables correctivas, sino auténticas de demanda de algunos servicios que se deben recoger en el Sistema de Financiación Autonómica. De hecho, la OCDE acredita que el coste anual de la educación primaria es un 33% superior en las áreas rurales que en las ciudades y el de la educación primaria es un 14% superior en las zonas remotas que en las metropolitanas.

Aragón defiende la inclusión de estas medidas correctoras y a aumentar otras con las que está de acuerdo para alcanzar al 5% del reparto. El responsable del Departamento de Hacienda, Interior y Administración Pública, defendió la necesidad de reformar el sistema de financiación autonómica en "época de bonanza económica como la actual" ya que, recordó, la mayor parte de los ingresos corresponden al IRPF y el IVA que, en crisis son los más castigados debido al paro y a que el consumo baja.