Agentes de la Policía Nacional en colaboración con el Ayuntamiento de Algeciras, han llevado a cabo una Operación Policial en la que han sido detenidas dos personas como presuntas autoras de un delito contra los derechos de los trabajadores y por un delito de favorecimiento de la inmigración irregular.
Los agentes iniciaron la denominada como "Operación Pastela" a raíz de una inspección conjunta con la Inspección Provincial de Trabajo en una panadería situada en el centro de Algeciras, siendo detectada en su obrador una mujer en situación irregular, aprovechando los dos detenidos, madre e hijo, la situación de vulnerabilidad de esta mujer para imponer condiciones laborales abusivas y con la advertencia de que si la Policía accedía al local tenía que huir del mismo a toda costa para no ser detenida.
Fruto de esta investigación se conoció que la víctima se encontraba explotada laboralmente, ya que soportaba altas temperaturas, trabajando unas 60 horas semanales, sin descanso alguno, ni si quiera cuando se encontraba enferma, y por un salario inferior al resto de sus compañeros, aceptando esas condiciones al no tener otro modo con el que mantener a su familia en el extranjero, y debido a que sus empleadores le adeudaban parte de su salario, tenía la esperanza de cobrar si continuaba ejerciendo sus funciones.
Los agentes adscritos a la UCRIF de Algeciras tienen conocimiento de la reiteración de estas conductas en zonas fronterizas como el Campo de Gibraltar, donde por un lado empleadores sin escrúpulos se aprovechan de trabajadores irregulares para imponer condiciones laborales cercanas a un régimen de semiexclavitud, y por otro lado posibilita el florecimiento de una economía sumergida cuya consecuencia más notable es poner en desventaja económica y de mercado a empresarios que cumplen con lo establecido en la legislación laboral.