Agentes del Grupo de Tráfico Ilícito de Vehículos de la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (UDYCO III), en colaboración con el Puesto Fronterizo de la Policía Nacional, han llevado a cabo la desarticulación de una red criminal dedicada al tráfico ilícito de vehículos. En el marco de la denominada Operación Pikine, se ha logrado recuperar ocho automóviles y la detención de once personas vinculadas con esta actividad delictiva.
La investigación se inició en abril del año pasado, tras detectarse el cruce de vehículos de gama media y alta con matrículas provisionales francesas a través del control fronterizo en dirección a Tánger. Los primeros indicios surgieron con la intercepción de dos vehículos en el Puerto Marítimo de Algeciras, conducidos por ciudadanos franceses de origen senegalés y portando matrículas falsas.
Tras comprobar que las empresas afectadas no habían autorizado la alteración de la matrícula ni la documentación de los vehículos, se inició una investigación en profundidad. Como resultado, se ha conseguido recuperar un total de ocho turismos y proceder a la detención de once individuos vinculados a una red organizada dedicada a esta actividad delictiva.

Los detenidos formaban parte de una estructura criminal organizada y eran los responsables de cruzar los vehículos a través de la frontera. Una vez en el continente africano, los automóviles eran trasladados a Senegal y otros países del Sahel, donde se les asignaban nuevas matrículas y documentación oficial para ser revendidos en el mercado negro. Se estima que el valor total de los turismos intervenidos ronda el medio millón de euros.
El principal desafío de este tipo de operación radica en que los propietarios desconocen la situación legal de sus vehículos y el cambio fraudulento de matrículas, lo que permite a los delincuentes cruzar la frontera sin que existan denuncias previas en su contra.
Seis de los ocho vehículos recuperados portaban matrículas temporales francesas en el momento de su intercepción. Estas placas se obtienen por internet en Francia y carecen de medidas de seguridad que permitan una verificación rigurosa de la documentación. Posteriormente, los soportes de matrícula son recogidos en talleres no homologados, donde se realiza el troquelado antes de su instalación en los automóviles.
Los arrestados carecían de antecedentes policiales en España, lo que les permitía pasar desapercibidos en los controles fronterizos. Sin embargo, la mayoría contaba con diferentes antecedentes en Francia, lo que evidencia la existencia de una red delictiva internacional.
Toda la información obtenida durante la operación ha sido remitida a las autoridades francesas a través de los organismos de cooperación policial, con el objetivo de ampliar las investigaciones y proceder a la identificación de otros miembros de la organización criminal.
La Policía Nacional continúa trabajando en la lucha contra el tráfico ilícito de vehículos y refuerza su compromiso con la seguridad fronteriza y la cooperación internacional para desarticular redes delictivas dedicadas a este tipo de delitos.