La Policía Nacional, con el apoyo de la Policía Local de Jerez de la Frontera, desplegó en la noche de ayer un amplio operativo en la Avenida Blas Infante y zonas adyacentes, en respuesta al preocupante aumento de concentraciones de jóvenes con actitudes violentas que alientan a motoristas temerarios a realizar maniobras peligrosas en la vía pública.
Aunque esta problemática no es nueva, en los últimos días se ha intensificado un incremento de la violencia dirigida hacia los agentes presentes en la zona. Durante la noche del pasado sábado, 22 de marzo, varios agentes de la Policía Local fueron atacados con extintores y piedras, lo que motivó una respuesta contundente con mayor presencia policial en la noche del lunes 24.
El patrón de estos incidentes se repite: una decena de motoristas, utilizando motocicletas no homologadas, sin matrícula ni seguro obligatorio, irrumpen en la avenida realizando maniobras altamente peligrosas. Paralelamente, grupos numerosos de jóvenes se congregan en las aceras para jalear a los motoristas, exponiéndose también ellos mismos a un grave riesgo de atropello en caso de pérdida de control de los vehículos.
La situación se agravó entre la noche del lunes 24 y la madrugada del martes 25 de marzo. A partir de las 22:00 horas, comenzaron a concentrarse en los laterales de la avenida unos cuatrocientos jóvenes, en su mayoría con el rostro cubierto, convocados a través de redes sociales que incitaban abiertamente a la violencia contra la policía.

Poco después, unos quince motoristas irrumpieron en la vía ejecutando maniobras provocativas y peligrosas, lanzando extintores y bengalas desde sus vehículos contra los coches patrulla, y acometiendo de forma temeraria contra ellos. Mientras tanto, desde la masa se arrojaron piedras, cascotes de gran tamaño y bengalas prohibidas contra los agentes. Incluso se utilizó un láser de alta potencia con la intención de cegar a los policías que conducían los vehículos oficiales, poniendo en riesgo su integridad y la de los ciudadanos presentes.
Ante la gravedad de los hechos, intervino la Unidad de Prevención y Reacción (UPR) de la Policía Nacional, haciendo uso proporcional y escalonado de medios antidisturbios. Como resultado de la actuación, se procedió a la detención de dos individuos:
Un varón de 25 años, natural y residente en Dos Hermanas (Sevilla), con 28 antecedentes policiales, identificado como uno de los más agresivos y miembro de un grupo violento habitual.
Un segundo varón de 22 años, nacido y vecino de Chiclana de la Frontera (Cádiz), fue detenido cuando intentaba huir, acusado también de atentado contra agente de la autoridad y desórdenes públicos.
Ambos individuos se habrían desplazado expresamente hasta Jerez con la intención de participar en los disturbios.
Además, se han levantado ocho actas por infracciones graves a la Ley de Seguridad Ciudadana 4/2015, y se han intervenido diversos objetos, entre ellos cascos de moto y teléfonos móviles abandonados durante los altercados. La investigación continúa abierta, con el objetivo de identificar y detener a más implicados, algunos de los cuales lanzaban objetos contundentes desde tejados y azoteas de la barriada de Santo Tomás de Aquino, comprometiendo seriamente la seguridad de los agentes.
La Policía Nacional reitera su compromiso con la seguridad ciudadana y su firme determinación para erradicar estas conductas violentas y peligrosas que ponen en riesgo la convivencia en nuestras calles.