Santa Cruz solicita a la DGT una regulación que concrete el uso de los patinetes eléctricos

El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, a través del área de Movilidad y Accesibilidad Universal, ha solicitado a la Dirección General de Tráfico (DGT) la incorporación de una regulación nacional que permita concretar algunos aspectos relacionados con los Vehículos de Movilidad Personal (VMP), como es el caso de los patinetes eléctricos en la capital.

El alcalde de la ciudad, José Manuel Bermúdez, puso de manifiesto la importancia "de encontrar un equilibrio entre la innovación en la movilidad y la seguridad pública, fomentando un uso responsable y cívico de los patinetes eléctricos. Por eso es necesario que se unifiquen criterios para que todas las ciudades podamos aplicar la norma conforme a lo que dictamine la Dirección General de Tráfico".

En una carta oficial de la edil del área, Evelyn Alonso, dirigida al director de la DGT, Pere Navarro, expone la "la necesaria concreción de un reglamento que permita minimizar la siniestralidad en las vías urbanas ante los nuevos comportamientos de movilidad en nuestras ciudades".

En esta línea, recuerda que "el consistorio capitalino, de una manera proactiva y ante la ausencia de regulación en determinados aspectos, promovió durante el pasado año 2023 la tramitación de una nueva ordenanza de Movilidad que recoge regulaciones relativas al comportamiento y exigencias de los usuarios más vulnerables en las vías de la ciudad, como peatones, ciclistas y usuarios de VMP". Asimismo, la edil "reconoce el trabajo de la DGT en la actualización del Reglamento General de Circulación y de desarrollo del Real Decreto de protección a los usuarios vulnerables".

Desde el área de Movilidad se propone a la DGT la integración de una serie de sugerencias para la mejora y el uso de los VMP, entre las que destacan las siguientes: El uso obligatorio del casco para usuarios de bicicletas y patinetes; un seguro de responsabilidad civil obligatorio para que, en caso de un atropello a un peatón, estos estén protegidos; algún tipo de registro o código de identificación en el vehículo para que, ante una infracción, los policías locales puedan sancionar; establecer una edad mínima de uso de bicicletas y patinetes; el uso de chaleco o elementos reflectantes; y una formación mínima (teórico-práctica) para estos conductores.