El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, en colaboración con la Empresa Mixta de Aguas de Santa Cruz de Tenerife (Emmasa), integrada en el Grupo Sacyr, avanza en las obras de canalización de abastecimiento Ofra-El Chorrillo, que permitirán el abastecimiento de agua desalada al Distrito Suroeste y el fin de las restricciones en la zona la última semana de febrero.
El alcalde José Manuel Bermúdez y el concejal de Servicios Públicos, Carlos Tarife, visitaron algunos puntos clave de la obra para conocer el detalle de los trabajos que se han venido ejecutando en los tramos A, B y C de la segunda fase del proyecto y que, gracias al refuerzo de los medios disponibles, culminarán seis meses antes de lo previsto.
"La finalización de estos trabajos supone un hito para el municipio a través del que más de 19.000 personas dejarán de depender del suministro de agua que llega desde el norte de la isla para abastecerse de agua proveniente de nuestra estación desaladora de agua de mar", asegura el alcalde.
En este sentido, el primer teniente de alcalde y concejal, Carlos Tarife, recuerda que el elevado nivel de flúor en el suministro de la zona se debía a la reducción de los caudales de aporte a través de los canales de Araya y Río Portezuelo, así como el empeoramiento de la calidad del agua suministrada por el canal trasvase Los Dornajos-Baldíos, debido a la sequía. "La evolución de estas obras es la materialización de que desde Santa Cruz estamos proponiendo y ejecutando medidas para paliar la escasez de agua y garantizar el acceso a la misma por parte de todos nuestros vecinos y vecinas", indica.
Una vez finalizada la obra y realizados los análisis pertinentes por Salud Pública, el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife informará sobre el fin definitivo de las restricciones que hasta ahora afectan a los barrios de La Gallega, Llano del Moro y El Sobradillo, en los que se detectaron niveles elevados de flúor, que se recomienda evitar en menores de ocho años.