El Gobierno de Cantabria ha comenzado a matar lobos en la temporada más sensible para la especie, con opacidad y de forma totalmente apresurada. WWF condena la actuación del ejecutivo regional y exigirá los informes que, en cumplimiento de la normativa vigente, deben justificar cada una de las muertes de lobos.
WWF recuerda que el estado de conservación del lobo a nivel nacional es desfavorable-inadecuado. La organización insiste en que matar ejemplares indiscriminadamente y sin una justificación adecuada para reducir la población, como pretende Cantabria, es ilegal.
Asimismo, lamenta que el Gobierno de Cantabria haya anunciado el inicio de las matanzas de lobos en las zonas de Campoo-Los Valles y Poblaciones a través de unas declaraciones a los medios de comunicación, ocultando a la sociedad el número de lobos muertos e insistiendo en el eufemismo de la "extracción" de ejemplares. El Gobierno de Cantabria aprobó el pasado 2 de abril la resolución para matar 41 ejemplares en la temporada 2024-2025, pese al estado desfavorable de la especie.

Además, WWF denuncia que las muertes se están produciendo en plena época de cría, el momento más sensible para la especie. Es posible que se estén matando hembras reproductoras y, por lo tanto, que no haya cachorros está temporada, o que las manadas se desestructuren y se rompan. Según la evidencia científica, esto tiene un impacto negativo sobre la población y puede incrementar los ataques al ganado.
WWF exigirá a Cantabria los informes sobre cada lobo muerto y las justificaciones técnicas que lo avalen, para verificar que cumplen con la normativa vigente. La especie sigue protegida por la Directiva Hábitats de la UE y, en su estado actual, las administraciones regionales deben asegurar la expansión a otros territorios y el crecimiento de las poblaciones en su propio ámbito geográfico.