El Museo Zuloaga de Segovia presenta dos exposiciones que podrán visitarse en la sede del centro cultural, en la iglesia de San Juan de los Caballeros, hasta el próximo mes de abril: 'Visitando la plaza. Turégano y Daniel Zuloaga', organizada en el marco de las actividades del centenario de la muerte del ceramista, y 'Alfarería tradicional de Segovia. Herencia para el presente', dedicada a la cerámica de uso cotidiano.
La secretaria territorial de la Delegación de la Junta, Ana Isabel Fuente, el vicepresidente de la Diputación Provincial de Segovia, José María Bravo, el alcalde de Fresno de Cantespino, Nicolás Guijarro, y representantes del Ayuntamiento de Turégano han sido los encargados de inaugurar esta mañana ambas exposiciones que, aunque son de contenido diferente, tienen en común el valor del oficio y el arte de la cerámica.
'Visitando la plaza. Turégano y Daniel Zuloaga'
Esta muestra monográfica, organizada por el Museo de Segovia, la Diputación Provincial y el Ayuntamiento de Turégano, con la colaboración de la Asociación de Amigos del Museo, reúne obras cerámicas de Daniel Zuloaga con Turégano como tema, junto a bocetos, dibujos y fotografías que sirvieron al artista para llevar a cabo estas piezas. Los materiales que se presentan proceden de la colección del Museo Zuloaga y de las colecciones privadas de Antonio Herrero Gómez y José Manuel de la Riva Zorrilla que han cedido las piezas para esta exposición.
Daniel Zuloaga, sus hijos y su sobrino Ignacio permiten al espectador viajar a los primeros años del siglo XX, a través de las fotografías que realizaban durante sus excursiones por la provincia de Segovia. Tomaban instantáneas de lo que les llamaba la atención, con el objetivo final de ser empleadas para sus posteriores trabajos, tanto de cerámica por parte de Daniel y sus hijos, como para plasmar en sus lienzos, por parte de Ignacio.
Turégano fue uno de los pueblos a los que acudían reiteradamente. Su patrimonio y sus fiestas eran un reclamo importante para estos artistas. Las escenas de la Plaza Mayor y el Castillo se elevan como protagonistas en sí mismas o como fondo de actividades cotidianas tanto en las fotografías como en las cerámicas de Daniel.
Con la presentación de estas fotografías y piezas, el Museo Zuloaga de Segovia, además de dar a conocer la figura y obra del ceramista Daniel Zuloaga, pretende acercar a los ciudadanos la realidad de los pueblos de Segovia a inicios del siglo XX, realidad que en muchos casos se ha olvidado por completo, o tan sólo la recuerdan los más mayores, pero que gracias a la documentación y obras de 'los zuloagas' se puede mostrar para recuperar los espacios, las festividades y los pueblos de la provincia.
'Alfarería tradicional de Segovia. Herencia para el presente'
También se ha inaugurado esta mañana la exposición que el Museo Zuloaga dedica a la cerámica de uso cotidiano. Para su organización, el Museo ha contado con la colaboración de la Diputación Provincial de Segovia, la Asociación de Amigos del Museo, la Fundación Torreón de Lozoya, 'Alfarería Martín' y 'Alma de Cántaro'.
La exposición está comisariada por los especialistas Enrique Martínez Glera y Ricardo Fernández López, conocedores del significado histórico y cultural de la alfarería, del alcance que tiene su conocimiento y de la trascendencia que conlleva su presentación para preservar y recordar esa parte del alma de la cultura tradicional, tan cercana y a veces tan desconocida para el gran público.
Los materiales originales que reúne la muestra están datados entre los siglos XVIII y XXI y proceden en su mayor parte de colecciones privadas, aunque también hay una pequeña representación de la colección del Museo de Segovia. La selección de piezas atiende las poblaciones, los 'barros' y la geografía humana e histórica del territorio provincial, para presentar en el Museo los talleres segovianos, los ya desaparecidos de Aldea Real, Cantalejo, Carbonero el Mayor, Cerezo de Arriba, Coca, Cuéllar, Hoyuelos, Lastras de Cuéllar, Navas de Oro, Ochando, Pedraza, Riahuelas, Segovia, Santa María la Real de Nieva, Vegas de Matute, Villacastín y Villaseca; o el todavía activo de Fresno de Cantespino.
La presentación de un exposición temporal de alfarería tradicional en la iglesia de San Juan de los Caballeros, antiguo taller de un artista cerámico como Daniel Zuloaga, podría parecer una paradoja, a tenor de ese distanciamiento conceptual entre alfarería tradicional y cerámica artística, pero se trata, más bien, del encuentro y el diálogo entre las manufacturas para el abastecimiento cotidiano de las sociedades tradicionales y el significado social y cultural del arte cerámico.
La muestra responde a la necesidad de reconocimiento de la alfarería y de sus protagonistas, los alfareros, que en los últimos siglos han ofrecido unas producciones de primera necesidad en todo el territorio segoviano. La exposición pretende hacer entender al público general, y al más especializado, el significado de la alfarería, su recorrido y sus características esenciales.