La Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio ha reunido esta mañana a alcaldes de la zona de los cañones del río Duero, tanto de las poblaciones de esta zona como las áreas limítrofes, con el fin de informarles sobre los estudios realizados sobre la reintroducción del lince ibérico en la provincia de Zamora y de Palencia, que han sido avalados por el Comité Nacional de Flora y Fauna del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.
El objetivo de la fase actual de comunicación es evaluar la aceptación de este proyecto por parte de los alcaldes, vecinos, propietarios de los terrenos, agricultores, cazadores y ganaderos y, en su caso, con el apoyo de los agentes locales afectados avanzar en la materialización de este proyecto de reintroducción.
La Junta de Castilla y León ha concluido los primeros trabajos técnicos para la valoración de áreas susceptibles de albergar poblaciones de esta especie, en el marco de la Estrategia Nacional para la Conservación del Lince Ibérico y del compromiso de Castilla y León de realizar su reintroducción donde ecológica y socialmente sea viable, concretamente en los cañones del Duero en la provincia de Zamora y el Cerrato en Palencia.
La delegada territorial, Leticia García, ha manifestado al inicio de la reunión técnica que "el Plan de recuperación del lince Ibérico en Zamora se hará con el necesario apoyo social, por lo que ahora se está en la fase divulgativa para que todas las partes implicadas conozcan dicho proyecto y por eso la reunión con los representantes municipales de la zona y área limítrofe de los cañones del Duero a su paso por nuestra provincia es el comienzo de la comunicación del proyecto a la población local y resto de sectores implicados como agricultores y ganaderos o cazadores de estas comarcas".
"Este proyecto de recuperación del lince ibérico, según recoge el estudio técnico, es un eficaz controlador de otros depredadores más generalistas como el zorro o el meloncillo, dando como resultado que en aquellos territorios donde se establecen poblaciones de este felino disminuye notablemente la densidad de otros depredadores, beneficiando de este modo a las poblaciones de especies cinegéticas de caza menor" ha destacado la delegada en su intervención ante los alcaldes. Asimismo, ha señalado Leticia García que "el lince no afecta significativamente a la ganadería extensiva, al estar en su dieta de forma mayoritaria el conejo, que causa importantes daños en el cultivo y al mismo tiempo supone un motor económico derivado de las mejoras del hábitat y del auge del turismo de naturaleza".
En la reunión han estado presentes además de la delegada territorial, Leticia García, el jefe del servicio de Medio Ambiente de Zamora, Manuel Moreno y técnicos de este departamento, así como el jefe de Espacios Naturales, David Cubero. Los alcaldes citados son: Almaraz de Duero, Andavías, La Hiniesta, Muelas del Pan, Pereruela, Roales, Villaseco del Pan y Zamora como municipios para la posible reintroducción del lince y por parte del área de influencia son: Carbajales de Alba, Fonfría, Losacino, Moral de Sayago, Palacios del Pan, San Pedro de la Nave-Almendra, Videmala y Villalcampo.
El lince ibérico se extinguió en Castilla y León en la década de los ochenta o principios de los noventa del siglo pasado, coincidiendo con un importante declive en las poblaciones de conejos debido a la aparición de la denominada Enfermedad Hemorrágico Vírica, que atacó a las poblaciones de conejo a nivel mundial y castigó severamente a las poblaciones ibéricas, previamente mermadas por los efectos de la mixomatosis, llegando en muchos casos a la práctica desaparición del conejo silvestre en zonas donde era tradicionalmente abundante.
Esta especie, que únicamente vive en España, se encuentra catalogada en peligro de extinción, habiendo estado al borde de su extinción global a principios de este siglo, quedando solo dos núcleos aislados con menos de 50 individuos adultos. Desde el año 2002, los sucesivos programas de conservación y reintroducción desarrollados han permitido salvar de la extinción a esta emblemática especie de la fauna ibérica, habiéndose multiplicado los ejemplares hasta alcanzar en el último censo los 1.668, con 326 hembras reproductivas detectadas. Sin embargo, la viabilidad de esta especie aún sigue viéndose amenazada, debido principalmente a factores demográficos y genéticos.