Conocer las amenazas que afectan a la conservación de los paíños y mejorar la protección de las poblaciones de estas aves a escala europea es el objetivo principal de SEAGHOSTS, uno de los 33 proyectos europeos seleccionados en el marco de la convocatoria BiodivMon y coordinado por el profesor Raül Ramos, de la Facultad de Biología y del Instituto de Investigación de la Biodiversidad de la Universidad de Barcelona (IRBio-UB).
SEAGHOSTS se destaca también como uno de los seis proyectos financiados de instituciones estatales en el marco de la convocatoria, dirigida a mejorar el seguimiento de la biodiversidad y el cambio de los ecosistemas en el marco europeo. En concreto, el proyecto dispondrá de una financiación de más de dos millones de euros para afrontar el reto de conocer a fondo las aves marinas más pequeñas del mundo, los paíños.
Todos los proyectos seleccionados serán financiados por el Partenariado Europeo de Biodiversidad (Biodiversa+), un consorcio que potencia la investigación de excelencia para proteger la biodiversidad y que cuenta con la financiación de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico. En esta convocatoria europea, la UB también es una entidad socia del proyecto DNASense, liderado por la Universidad de Estocolmo (Suecia) y cuenta con la participación del profesor Owen Wangensteen, de la Facultad de Biología y el IRBio.
Paíños como bioindicadores
Para conservar la biodiversidad global de forma efectiva, "es necesario comprender la ecología espacial de la fauna en libertad. El proyecto SEAGHOSTS tiene como principal objetivo profundizar en el conocimiento de la ecología espacial global y la conservación de los paíños (Hydrobatidae y Oceanitidae), y evaluar los principales impactos antropogénicos que estos afrontan en los ecosistemas marinos del litoral europeo: cambio climático, energías renovables, acuicultura y exposición a los microplásticos", detalla Raül Ramos, miembro del Departamento de Biología Evolutiva, Ecología y Ciencias Ambientales y coordinador de SEAGHOSTS.
Teresa Militão y Raül Ramos durante el trabajo de campo
"El proyecto quiere abordar los vacíos de conocimiento sobre la biodiversidad marina combinando datos disponibles de seguimiento —demográficos, morfológicos, genéticos y tróficos— con nuevos datos que se adquirirán durante el proyecto, y así complementar el muestreo en toda Europa. Este conocimiento también contribuirá, de manera más robusta y específica, a la definición de las distintas Unidades de Conservación (CU) de paíños que habitan nuestros mares europeos", detalla el investigador.
En el proyecto, que se desplegará en los próximos tres años, participan un total de 16 socios de 10 países europeos (España, Dinamarca, Alemania, Portugal, Grecia, Noruega, Italia, Francia, Irlanda, Islandia) y también uno de Estados Unidos y otro de Canadá.
La huella humana se distribuye de forma irregular a lo largo de los océanos y a través de diferentes fronteras políticas, pero su impacto en el medio marino ha sido poco estudiado. Esta carencia de conocimiento, por ejemplo, a menudo dificulta el compromiso de la UE con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas (ODS-UN). Aunque la sociedad europea está particularmente sensibilizada con los procesos de transición verde para mitigar los cambios globales, la gran inversión en tecnologías bajas en carbono y el rápido cambio hacia fuentes de energía renovables (por ejemplo, parques eólicos y solares marinos) pueden tener también impactos muy dañinos en entornos marinos.
"Los paíños son excelentes centinelas del ecosistema marino: son altamente pelágicos, recorren largas distancias sobre el mar, se alimentan principalmente de plancton, son muy longevos a pesar de su reducido tamaño y son extremadamente sensibles a las amenazas antropogénicas en general. Hasta ahora, su tamaño corporal y su comportamiento esquivo han supuesto una limitación muy importante para su estudio", detalla Raül Ramos.
Conocer las rutas migratorias del pájaro de tormenta permitirá identificar amenazas y señalizar los puntos críticos de las instalaciones de fuentes renovables que pueden afectar a las poblaciones de aves migratorias. En concreto, permitirá identificar los puntos calientes (hotspots) no cubiertos por la actual red de Áreas Marinas Protegidas (AMP), editar mapas de sensibilidad de diversos impactos antropogénicos y contribuir a definir Unidades de Conservación (CU) más precisas.
Estudiar la biodiversidad con técnicas de vanguardia
El uso de dispositivos geolocalizadores ultraminiaturizados, la modelización de hábitats, el análisis de isótopos estables, el análisis metabarcoding de DNA, la morfometría geométrica, así como la caracterización de microplásticos son algunas de las metodologías que aplicará el proyecto SEAGHOST para determinar los movimientos y distribuciones de invernada de seis especies migratorias de pájaro de tormenta, incluso de las especies más pequeñas.
SEAGHOSTS aportará una perspectiva innovadora y crítica actual sobre los impactos antropogénicos en el medio marino —en especial, como estos impactos afectan a especies hasta ahora casi olvidadas— que será clave para una mejor gestión y conservación de la biodiversidad marina.