La Guardia Civil, con la colaboración de EUROPOL, ha desarticulado una organización criminal dedicada al tráfico internacional de drogas asentada en Barcelona. La red operaba a gran escala en el tráfico internacional de cocaína y posterior blanqueo de capitales. La operación "Miltruck Frenchi" se ha desarrollado en varias fases desde 2022, ha culminado con la detención de 25 personas y se han realización 29 registros en Barcelona, Madrid, Valencia, Málaga y Cádiz. Durante los operativos, se han incautado más de seis millones de euros en efectivo, grandes cantidades de droga, armas de guerra, multitud de artículos de lujo y vehículos de alta gama.
Modus operandi de la organización criminal
La organización utilizaba métodos sofisticados para el tráfico de cocaína, introduciendo la droga en España a través de contenedores marítimos de productos aparentemente legales, como maquinaria industrial y frutas tropicales.
La red operaba con una estructura jerárquica bien definida desde inversores y testaferros hasta personal portuario encargado de facilitar la extracción de la droga, pasando por distribuidores y encargados del blanqueo de los beneficios. La organización disponía de una gran cantidad de armamento, lo que la convertía en un grave riesgo para la seguridad ciudadana.
En la cúspide se encontraba el líder de la organización bajo el alias de "Lucky", quien coordinaba las operaciones y ocultaba su implicación directa utilizando un testaferro para realizar transacciones legales y bienes adquiridos con dinero ilícito.
Bajo el líder operaban dos lugartenientes con los alias "Bugatti" y "Negro", esto permitía a la organización descentralizar las operaciones y minimizar riegos. Además, ejercerían funciones relacionadas con la importación y distribución de la droga.
En la base de la red se encontraban tres grupos especializados pero los líderes se aseguraban de que cada nivel tuviera un conocimiento limitado de los otros. Así dificultaban la desarticulación total de la organización.
La red contaba con un trabajador portuario que controlaba los movimientos de la mercancía oculta en contenedores. Los "rescatadores" se encargaban después de que el cargamento llegara a los mercados locales e internacionales.
Desarrollo de la investigación
En enero de 2022 se inició la investigación cuando los agentes intervinieron 620 kilogramos de cocaína ocultos en el interior del rotor de un generador eléctrico, importado desde una empresa de Panamá. Tras este hecho se establecieron alertas para seguimientos a envíos vinculados a esta empresa y que detectara posibles conexiones y ramificaciones de la organización.
Unos meses después, se detectó en el aeropuerto de Madrid-Barajas otro envío con 200 cajas de piñas y en su interior se hallaron más de 62 kilogramos de cocaína. La droga encontrada fue objeto de una entrega controlada en Barcelona que permitió identificar a miembros de la red y continuar la investigación.
Durante la investigación se incautaron más envíos de droga en diferentes puertos internacionales entre ellos: tres contenedores intervenidos en Panamá con un total de 4.100 kilogramos de cocaína, dos más en España uno con 700 kilogramos y otro con 1.600 kilogramos de cocaína en su interior. Estos hallazgos consolidaron la estructura delictiva de la organización.
Explotación de la investigación
En la primera fase la Guardia Civil llevó a cabo la detención de tres personas y la investigación de ocho personas, la aprehensión en España de 620 kilogramos de cocaína y de 181.000 euros en metálico.
En esta segunda fase se intervinieron más de 62 kilogramos de cocaína, ocultos en una partida de piña natural procedente de Costa Rica y con destino Barcelona, deteniendo a un total de cuatro personas y 7900 euros en metálico.
La tercera fase se desarrolló en tres etapas el pasado mes de diciembre y en total se realizaron 29 registros y 25 de detenciones en las provincias de Barcelona, Valencia, Málaga, Madrid y Cádiz.
Resultados de la operación
Se han intervenido en España más de 3.000 kilogramos de cocaína, 144 plantas de marihuana, así como equipamiento especializado para su cultivo. En Panamá se han intervenido un total de 4.100 kilogramos de cocaína.
Entre los efectos incautados se encuentran 48 armas de fuego, incluyendo un fusil de asalto AK-47, armas largas automáticas, subfusiles de asalto, escopetas, armas cortas con silenciador y revólveres. También se ha encontrado una colección de 38 armas de fuego históricas, así como una gran cantidad de munición, pistolas eléctricas incapacitantes y puños americanos.
Durante los registros se hallaron más de seis millones de euros en dinero en efectivo que estaban distribuidos en domicilios y vehículos caleteados (adaptados en compartimentos ocultos que generalmente se accede mediante mecanismos electrónicos). También se incautaron 15 relojes de lujo junto con joyas de alto valor económico y 29 vehículos de alta gama utilizados para el transporte de droga y dinero. Además, se intervinieron 34 dispositivos electrónicos, móviles, ordenadores, drones, discos duros, varios sistemas de inhibición de frecuencia y escrituras notariales y otros documentos vinculados a propiedades y activos relacionados con actividades de blanqueo de capitales.
La operación "Milktruck Frenchi", dirigida por el Juzgado de Instrucción número 3 de Lleida ha contado con la colaboración de la Agencia de la Unión Europea para la Cooperación Policial (EUROPOL) y la Oficina de Recuperación y Gestión de Activos (ORGA).
Dentro de la colaboración internacional se ha compartido información con Costa Rica, Panamá, Dubái y Colombia a través del Centro de Inteligencia Criminal Antidroga, dirigido por la Guardia Civil en el marco del Proyecto GDIN, el cual estaba financiado por la Comisión Europea.