La vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, acompañada del delegado de Familias, Igualdad y Bienestar Social, Pepe Aniorte, ha visitado este miércoles el centro de emergencia Las Caracolas para interesarse por la situación de las primeras familias ucranianas que se encuentran en este recurso municipal.
Durante su visita, Villacís ha destacado que el centro Las Caracolas acoge actualmente a 21 personas ucranianas, en su mayoría familias, que se encontraban en España y que no pueden volver a su país ante la invasión de Rusia. En este sentido, la vicealcaldesa ha subrayado que Madrid es “una ciudad abierta y acogedora” que está dispuesta a darles “la mejor atención” hasta que el Gobierno de España se haga cargo de su situación como administración competente en asilo y refugio.
“El Ayuntamiento, en un centro como este, da una respuesta temporal a estas familias acompañándolas en el proceso de solicitud y atendiendo todas sus necesidades sociales con la mayor calidad”, ha señalado. En concreto, ha explicado que Las Caracolas cuenta con 60 profesionales que trabajan las 24 horas del día para atender las necesidades de los usuarios, que están en una situación “muy vulnerable”. Entre ese apoyo, se encuentra el alojamiento transitorio y manutención, acompañamiento para las gestiones relativas a su solicitud de asilo y orientación sobre programas y recursos sociales.
El centro de Las Caracolas, con capacidad para 300 personas, se abrió en febrero de 2020 para dar respuesta a la emergencia social que vivía Madrid por la creciente llegada de solicitantes de asilo. Aunque la competencia de la acogida de los solicitantes corresponde al Gobierno central, el Ayuntamiento abrió Las Caracolas como alojamiento temporal hasta que el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones se haga cargo de los usuarios.