Agentes de la Policía Nacional han detenido en el distrito madrileño de Salamanca a dos varones implicados en el robo de más de un millón y medio de euros en efectos de una caja fuerte de un domicilio del distrito de Salamanca. Uno de ellos era un cerrajero, situación que aprovechó para cometer el robo. Además también se apoderaron de las grabaciones de cámaras de seguridad de la conserjería del edificio para evitar ser reconocidos posteriormente.
La investigación se inició a raíz de la denuncia de una persona a la que le habían robado en su domicilio donde forzaron su caja fuerte llevándose efectos y dinero de su interior. Inmediatamente los agentes comenzaron a realizar tareas de averiguación descubriendo que, momentos antes de ese hecho, también se había cometido otro robo con fuerza en el servicio de conserjería de ese mismo edificio apoderándose de las grabaciones de cámaras de seguridad.
Un cerrajero aprovechó su profesión para obtener información
Avanzadas las pesquisas, los investigadores comprobaron que, tiempo antes, la víctima había solicitado un servicio de cerrajería. En aquel momento un varón acudió a su vivienda a realizar un encargo, aprovechando esa circunstancia para obtener datos e información sobre su domicilio así como sobre una caja fuerte y los efectos que contenía.
Tres meses después, otro hombre, accedió al edificio y, tras cometer un robo con fuerza, se apoderó de las grabaciones de cámara de seguridad del servicio de portería para evitar que le reconocieran en posibles investigaciones y dificultar así la labor de la policía. Acto seguido, se dirigió a uno de los domicilios de donde se llevó más de 100 000 euros y efectos – la mayoría joyas – valorado todo ello en más de un millón y medio de euros.
Una vez identificados estos varones, se logró su localización y detención a finales del mes de junio, comprobando que uno de ellos tenía en su poder un reloj robado de la víctima, por lo que pasaron a disposición de la autoridad judicial como presuntos autores de un delito de robo con fuerza. Además, al cerrajero también se le imputó un delito de estafa en relación a la reparación que le realizó en el domicilio.