Agentes de la Policía Nacional han detenido in fraganti a cuatro varones especializados en el robo con fuerza de viviendas. Un grupo criminal compuesto por tres individuos, que operaba en la localidad de Alcalá de Henares, ha sido desarticulado y se le atribuyen 13 robos consumados y 31 en grado de tentativa. En una operación paralela, en el distrito madrileño de Chamberí, otro varón fue arrestado cuando marcaba puertas con hilos de silicona para comprobar si las viviendas se encontraban vacías.
La investigación de los hechos acaecidos en Alcalá de Henares se inició tras detectar una sucesión de robos con fuerza en domicilios desde el comienzo del verano, coincidiendo con el período vacacional. Ante esta situación y tras observar puertas de viviendas marcadas con hilos de silicona en determinadas zonas de la localidad, se estableció un amplio dispositivo de seguridad y de prevención para localizar a los responsables.
El operativo dio sus frutos el pasado 12 de agosto, cuando se tuvo conocimiento de que tres hombres habían accedido al interior de una vivienda y todavía se encontraban en su interior. Inmediatamente se acordonó la zona y se accedió al edificio, sorprendiendo a tres varones en el rellano de una de las plantas, portando abundantes útiles para la comisión de robos con fuerza, tales como ganzúas, tensores e imanes, entre otros. Asimismo, también se localizaron ocultos en la repisa de una ventana una colección de relojes de bolsillo y otras joyas que habían tratado de apropiarse.
Los agentes detectaron 31 puertas marcadas en el edificio
Una vez se sorprendió a estos tres varones, los agentes realizaron una inspección de todas las viviendas del edificio afectado, observando que un total de 31 puertas se encontraban marcadas con hilos de silicona o pegamento. Esta técnica delictiva es utilizada por quienes se especializan en la comisión de robos con fuerza como paso previo al momento de violentar la puerta y acceder al interior de los domicilios.
De esta forma, colocan dos pequeños puntos blancos de pegamento, uno en la propia puerta de acceso y otro en el marco que quedan unidos por un hilo –casi imperceptible– y que en caso de romperse, indicará que la vivienda se encuentra habitada y que no es un objetivo. Por el contrario, si unos días después, en una segunda visita, el hilo se encuentra intacto, los asaltantes tendrán la certeza de que no hay moradores en el interior del domicilio y accederán al mismo, ya sea mediante la técnica del 'resbalón' o utilizando otras más sofisticadas como el ganzuado, el impresioning o el bumping.
Un cuarto detenido en el distrito madrileño de Chamberí
Mediante idéntico modus operandi, en el distrito madrileño de Chamberí, un varón también fue sorprendido cuando se encontraba marcando viviendas. En este caso, no llegó a acceder al interior de ningún domicilio, pero sí realizó el acto previo, consiguiendo el marcado de 21 viviendas del edificio con hilos de pegamento para ser asaltadas en próximas visitas. Asimismo, entre sus pertenencias se encontraron varias llaves cuya procedencia no pudo justificar.
Por estos hechos, los cuatro varones fueron detenidos y puestos a disposición de la autoridad judicial, quien decretó el ingreso en prisión de todos ellos como presuntos autores de los delitos de robo con fuerza y pertenencia a grupo criminal.