Agentes de la Policía Nacional han desarticulado tres puntos de venta de heroína y cocaína en el distrito madrileño de Usera-Villaverde. Han resultado detenidas cuatro personas en dos operaciones paralelas. Uno de los arrestados vendía las sustancias estupefacientes en el entorno de parque infantil, aledaño a un centro cultural a plena luz del día. Los otros dos detenidos son los propietarios del domicilio que servía de punto de abastecimiento para el vendedor. En una operación paralela se ha desarticulado otro punto de venta en este mismo distrito tras interceptar en plena vía pública una transacción de droga.
La investigación comenzó el pasado mes de mayo, tras tener conocimiento, de que en las inmediación de un parque infantil se estaba vendiendo sustancias estupefacientes a plena luz del día. Iniciadas las pesquisas, los investigadores pudieron identificar al presunto vendedor. Posteriormente comprobaron, que una vez que los compradores, previo pago, realizaban su encargo, éste se desplazaba a un domicilio cercano para recoger la cantidad solicitada, regresando al parque para finalizar la transacción. Cabe reseñar, que en alguna ocasión, los compradores llegaban a consumir su dosis en el mismo lugar, sin importarles que hubiese viandantes o incluso menores de edad en la zona.
Por tales hechos, el pasado día 05 de septiembre, se efectuaron dos registros simultáneos en dos domicilios, en los que se han intervenido ocho gramos de heroína, un gramo de cocaína, dos básculas de pesaje, casi 2000 euros en efectivo, un fusil semiautomático, dos escopetas, además de 156 cartuchos de escopeta y 60 cartuchos de fusil. Finalmente, se procedió a la detención de dos varones y una mujer como presuntos responsables de un delito contra la salud pública, pasando posteriormente a disposición judicial.
Interceptada in fraganti una transacción de droga en plena vía pública
En otra operación paralela, el pasado día 20 de agosto, un indicativo policial interceptó en plena vía pública un transacción de droga entre dos varones. Tras unas rápidas pesquisas, los agentes se dirigieron al domicilio del presunto vendedor, presuponiendo que podría ser el punto de almacenamiento de la sustancia estupefaciente. En el interior de esta vivienda localizaron casi 7000 euros en efectivo, 3000 gramos de tusi, 500 gramos de ketamina, más de 5000 gramos de cocaína, 1000 gramos de cristal y casi 100 gramos de hachís, además de una báscula de precisión. Por tales hechos, se procedió a las detención de este individuo, como presunto responsable de un delito contra la salud pública. Tras su paso a disposición judicial se decretó su ingreso en prisión.