Sesenta macetas, sesenta balcones y ventanas y un análisis que determine cuál es la calidad del aire que se respira en Pamplona. Esos tres elementos forman parte de una nueva edición de la actividad Laboratorio de Ciencia Ciudadana del Museo de Educación Ambiental del Ayuntamiento de Pamplona, en la que el papel de la ciudadanía es fundamental. Su participación es clave para poder tener un muestreo en toda la ciudad. La implicación, por su parte, pasa por regar la maceta una vez a la semana para que la planta sobreviva el mes y medio o los dos meses que necesita para poder absorber el aire de su entorno y que pueda analizarse.
Aquellas personas que quieran sumarse a la iniciativa podrán hacerlo este martes, día 13, en una jornada de presentación del laboratorio, que tendrá lugar a las 18.30 horas en el Museo Educación Ambiental (ubicado en la calle Errotazar, número 21 bis). Allí recibirán las indicaciones de todo el proceso y una maceta con Lolium multiflorum o raigrás ya sembrado (césped), que deberán colocar en un espacio abierto (balcón o terraza) de su casa. Las personas interesadas deben inscribirse previamente en el teléfono de Atención Ciudadana 010 ó 948 42 01 00 (si se llama desde móviles o desde fuera de Pamplona).
El estudio de esas plantas, tras el periodo de exposición al aire de la ciudad, correrá a cargo del Instituto de Agrobiotecnología del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (IdAB-CSIC). Así, el investigador Iker Aranjuelo será el encargado de recopilar las plantas y someterlas a los procesos de secado y análisis para obtener los niveles de contaminación que hayan podido absorber. Para obtener unos resultados globales es necesario que la muestra abarque el mayor número de barrios y zonas de la ciudad posible. De esta forma se podrá delimitar qué áreas sufren más o menos contaminación.
El objetivo es que los resultados puedan darse a conocer en una jornada abierta al público de cara al mes de junio, después de pasar entre 45 y 60 días los tiestos en los balcones y ventanas de las personas participantes. De esta manera, se verá si hay presencia de metales pesados u otros elementos minerales, directamente relacionados con en el aire del entorno urbano que provienen del tráfico. Más allá de la exposición de datos, se pretende crear conciencia medioambiental entre la población de Pamplona y que ésta pueda desarrollar un espíritu crítico sobre los factores implicados en la calidad del aire.
Tercera edición en balcones y primera en rotondas
El Ayuntamiento de Pamplona ya realizó una primera experiencia piloto en 2022 con macetas de hierba en balcones. De hecho, durante los diferentes talleres de estudio de calidad del aire llevados a cabo con el Servicio de Educación Ambiental durante 2022 y 2023, se ha visto una importante diferencia en el contenido de metales pesados en los diferentes barrios de Pamplona. Los análisis permitieron identificar diferentes zonas en relación a los metales pesados (plomo, hierro, zinc, aluminio…), con un mayor contenido en aquellos situados en la avenida Zaragoza, Iturrama, San Jorge, San Juan y zona centro. Los puntos de muestreo con menor contenido de metales pesados estaban en los barrios periféricos (Mendillorri, etc.) y en aquellos puntos con baja densidad de tráfico y/o aquellos situados en avenidas amplias.
Además, el pasado mes de diciembre plantó 50 macetas con raigrás en una decena de rotondas de la ciudad. En concreto, se colocaron en la avenida Zaragoza, avenida Pío XII, Iturrama, plaza Príncipe de Viana, plaza de los Fueros, plaza Merindades, San Jorge, San Juan, Mendillorri, jardines de la Taconera, parque Yamaguchi, monumento a Juan Pablo II, ciudad deportiva Amaya. Estas muestras ya se han recogido y está ahora en procesamiento en el laboratorio del Instituto Agrobiotecnológico del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (IdAB-CSIC) en Mutilva.