Pedro Jesús del Pino, Pablo Fernández de la Puebla, Jesús Lérida, Abraham Luque y Manuel Millán son desde este miércoles los cinco nuevos diáconos que tiene la diócesis de Córdoba. Coincidiendo con la solemnidad de la Inmaculada Concepción de María se ha celebrado la ordenación diaconal, administrada por el obispo de Córdoba monseñor Demetrio Fernández, en la Santa Iglesia Catedral.
El prelado ha comenzado su homilía recordando que en la fiesta de la Inmaculada celebramos que María "no ha tenido nunca pecado. Por eso, mirarla a Ella hoy y todos los días del año es una esperanza para nuestro corazón como pecadores", ha destacado en un comunicado.
"En Ella encontramos la madre limpia. En este día se clausura el año dedicado a San José y por eso ha estado presente la imagen de San José Artesano de Lucena, que participó en la vigilia de la Inmaculada", ha añadido. El obispo ha querido dar gracias a Dios por este año josefino "en el que todos hemos tenido ocasión de acercarnos y pedirle su protección".
Asimismo, monseñor Demetrio ha señalado que hoy es un día "lleno de gracia para estos cinco jóvenes, y María Santísima os comunicará esta gracia como le hizo a Ella el Espíritu Santo" porque el sacramento del Orden y concretamente el del Diaconado "consiste en recibir el Espíritu Santo que os configura con Cristo siervo, servidor".
El obispo de Córdoba, junto a los cinco nuevos diáconos ordenados en el día de la Inmaculada
"La palabra diácono significa 'el que sirve' y en el ministerio del diaconado os comprometéis a servir especialmente a los pobres, a los enfermos y a todos los que sufren", ha continuado el obispo de Córdoba.
"Hoy celebramos el sacramento del diaconado y la fuerza del Altísimo os cubrirá con su sombra, de esta forma las obras que salgan de vuestro ministerio serán 'sobrenaturales': será Jesucristo prolongado en vuestra vida y en vuestro ministerio", ha apuntado el pastor de la Diócesis.
La Iglesia dispone que haya diáconos para que administren la caridad del pueblo santo de Dios en servicio de los pobres y de los que sufren. "A María Santísima os encomiendo en este día de la Inmaculada que os mantenga fieles como Ella y limpios de corazón. Oremos por los nuevos diáconos y que sean un espejo en el que pueda mirarse el pueblo de Dios", ha pedido monseñor Demetrio Fernández al término de su alocución.
Los nuevos diáconos, del Seminario Conciliar San Pelagio y de la Familia Eclesial Hogar de Nazaret, han recibido el primer grado del orden sacerdotal acompañados de numerosos sacerdotes de la Diócesis, los rectores, formadores y alumnos de los seminarios y familiares y amigos.