Juventudes Socialistas de España (JSE) ha mostrado este miércoles su satisfacción por la recuperación del plan de ayudas al alquiler joven que el Gobierno ha aprobado en su Consejo de Ministros y que, recuerdan desde la organización juvenil, fue víctima de los primeros recortes del PP en 2011. Así, las JSE pondrán en marcha la campaña ‘Ahora #NosToca’ para “reivindicar la apuesta del Gobierno por una generación que necesita la política más que nunca” a través de vivencias personales de la militancia socialista.
El Secretario General de las Juventudes Socialistas, Víctor Camino, ha manifestado en este sentido que “ahora nos toca a la gente joven protagonizar las políticas tras una travesía en el desierto que ha de finalizar con el Gobierno de Pedro Sánchez”, refiriéndose al llamado Bono Joven de Alquiler como “una acción fundamental que dará más confianza a la juventud en la política”. Además, el Plan Estatal de Vivienda debería, según el líder de las JSE, “combinarse con aumentos de salarios y respuestas ambiciosas para rebajar los precios de los alquileres”.
Y es que la edad media de emancipación en España sigue rozando los 30 años, según los estudios del Consejo de la Juventud, resultado de la precariedad laboral y la burbuja del mercado de alquiler, una realidad injusta que para Camino “nos tiene que hacer pasar de la indignación a los hechos, a seguir dando pasos valientes que nos garanticen el derecho a una vivienda digna”. Camino ha criticado el “no permanente” de la derecha a los avances, “su alternativa es la más cobarde: no hacer nada”, ha denunciado.
Esta renta por la emancipación es compatible con otros programas y ayudas del Plan Estatal de Vivienda y según señala el Vicesecretario General por una emancipación digna, trabajo y vivienda, José Ramón García, "es el primer paso para conseguir que la juventud inicie un camino con menos obstáculos para poder desarrollar un proyecto de vida que abandonar nuestros territorios y aprovechando el talento que tenemos a lo largo del país".
La medida, que contempla el pago de hasta 250 euros mensuales a personas inquilinas menores de 35 años, con una renta menor de 24.000€, podría beneficiar a cerca de 70.000 jóvenes de ingresos bajos que viven de alquiler en España.