La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO), ha publicado su avance climático del pasado invierno. En él se constata que se trató del invierno más cálido de la serie histórica, que arranca en 1961, empatado con el invierno de 2019-20. En cuanto a las precipitaciones, tuvo un carácter normal en conjunto, aunque fue húmedo en zonas del oeste del país y seco o muy seco en el Levante, puntos del Cantábrico, sur de Andalucía y los archipiélagos.
Temperaturas
El invierno 2023-24 (período comprendido entre el 1 de diciembre de 2023 y el 29 de febrero de 2024) fue muy cálido, con una temperatura media sobre la España peninsular de 8,5 ºC, valor que queda 1,9 °C por encima de la media de esta estación (periodo de referencia 1991-2020). Ha sido, junto con 2019-20, el invierno más cálido desde el comienzo de la serie en 1961.
El invierno tuvo carácter extremadamente cálido en la región mediterránea y muy cálido en el resto de la España peninsular. En Baleares fue muy cálido, mientras que en Canarias tuvo carácter extremadamente cálido. Los tres meses tuvieron temperaturas superiores al promedio del período de referencia y fueron frecuentes los episodios cálidos, es decir, de temperaturas superiores a las normales. Destacaron, por su intensidad y duración, los episodios que tuvieron lugar entre el 21 de enero y el 9 de febrero y entre el 12 y el 22 de febrero, ambos con temperaturas máximas y mínimas muy por encima de los valores habituales para la época del año. Otros episodios cálidos destacados fueron los de los días 8 a 13 de diciembre, 29 de diciembre a 4 de enero, y 13 a 19 de enero. En cuanto a bajas temperaturas, hubo varios episodios fríos con temperaturas por debajo de las normales, si bien ninguno de ellos puede considerarse como ola de frío.
Precipitaciones
El invierno fue, en su conjunto, normal en cuanto a precipitaciones, con un valor de precipitación media sobre la España peninsular de 170,5 mm, valor que representa el 90 % del valor normal del trimestre en el periodo de referencia 1991-2020.
No obstante, aunque el invierno tuvo carácter entre normal y húmedo en la mayor parte de la Península, en el Levante, puntos del Cantábrico y en el sur de Andalucía fue una estación entre seca y muy seca. En el archipiélago balear el invierno fue en general seco, y tuvo un carácter muy seco en Canarias.
El invierno comenzó con un diciembre muy seco; enero tuvo carácter normal y febrero fue más lluvioso de lo normal. Las precipitaciones ayudaron a paliar en parte la sequía meteorológica en las cuencas de acumulación del noroeste del país. Sin embargo, continuaba esta situación al finalizar el invierno en la mayor parte de la vertiente mediterránea, puntos del Cantábrico y ambos archipiélagos.
Predicción estacional
El trimestre, conformado por los meses de abril, mayo y junio, que aproximadamente coincide con la primavera astronómica, será, probablemente, más cálido de lo normal en todo el país, especialmente en el extremo norte peninsular, vertiente mediterránea y ambos archipiélagos. Sin embargo, no se puede dar un pronóstico detallado en lo que a lluvias se refiere, puesto que existen las mismas probabilidades de la primavera sea más lluviosa que más seca de lo normal.