Agentes de la Policía Nacional han detenido a un varón que simulaba ser técnico del servicio de asistencia a domicilio o revisor del gas para robar por toda España. Realizaba un contacto telefónico previo para concertar una cita y poder solucionar supuestas anomalías. Informaba a las víctimas de que se tenían que despojar de las joyas porque generaban supuestas interferencias en el servicio, momento que aprovechaba para sustraer los efectos de valor. Se les imputan cinco hurtos y un robo con violencia, contando además con diez reclamaciones judiciales por hechos similares.
La investigación se inició en octubre del pasado año cuando se detectaron varias denuncias que coincidían en un mismo modus operandi lo que llevo a los investigadores a pensar que podría tratarse de un mismo autor. Previamente se realizaba un contacto telefónico con las víctimas, siempre personas de edad, concertando una cita en sus domicilios para comprobar supuestas anomalías técnicas en el funcionamiento del servicio de asistencia a domicilio o del suministro del gas.
Se ganaba la confianza de las víctimas hasta que le permitían el paso al interior de las viviendas y, una vez dentro, les realizaba una encuesta sobre el funcionamiento de los aparatos de asistencia. Les explicaba que existían interferencias provocadas por los objetos de metal, como joyas y dinero en metálico, por lo que les pedía que le entregasen todos esos efectos – anillos, pendientes, cadenas -.
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Avanzadas las pesquisas, los agentes realizaron un dispositivo para la identificación y localización de este varón. A principios de este mes de abril, gracias a la labor de la Brigada Provincial de Policía Científica, se logró la confirmación de la implicación de este individuo en nuevos hechos delictivos.
"Ponga los pies en estos papeles y no se mueva"
Los investigadores pudieron constatar que en algunos casos les decía a las víctimas que se quedasen quietos en el salón con los pies encima de unos periódicos y se quitase todas las joyas para evitar así las interrupciones en el servicio. Mientras tanto realizaba una requisa del domicilio y se apoderaba de todo efecto de valor que encontrase.
Domicilio itinerante para evitar su localización
Finalmente, y a pesar de la dificultad que conllevó la investigación puesto que cambiaba de domicilio constantemente, se consiguió detener a principios de este mes en la ciudad de Madrid. Se le imputan un total de cinco delitos de hurto y un robo con violencia, contando además con diez reclamaciones judiciales por hechos similares cometidos por todo el país.