El Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones ha publicado la estadística de horas efectivas trabajadas y horas cotizadas correspondientes al primer trimestre de 2024. Esta información está calculada a partir de las cotizaciones sociales abonadas por las empresas y se facilita de forma trimestral con una serie que se inicia en enero de 2019.
Se trata de una estadística basada en datos administrativos elaborada a partir de las horas cotizadas y de las relaciones laborales por cotizante informadas a la Seguridad Social. Para calcular las horas efectivas trabajadas es necesario descontar las horas de los trabajadores en situación de ERTE, incapacidad temporal y de los perceptores de otras prestaciones (nacimiento y cuidado del menor, riesgo durante la lactancia natural y riesgo durante el embarazo)[1].
Estas horas cotizadas corregidas de estas situaciones suspensivas o, lo que es lo mismo, horas efectivamente trabajadas en el primer trimestre de 2024 son un 9,9% superiores a las del último trimestre de 2019 -fecha de referencia, de niveles prepandemia, si se comparan los datos de cada uno de estos trimestres-.
Para evitar la volatilidad que existe entre los diferentes trimestres y poder apreciar la evolución a medio plazo de las horas efectivas trabajadas, se incluye un índice basado en la media móvil de cuatro trimestres. Este índice se situó en el primer trimestre de 2024 en 109,9 puntos, siendo 100 el dato correspondiente al último trimestre de 2019; lo que significa que las horas efectivas trabajadas han experimentado un incremento del 9,9% respecto al nivel previo a la pandemia.
Más cotizantes y más horas efectivas
Este incremento se debe fundamentalmente a la combinación del aumento del número de cotizantes del Régimen General de la Seguridad Social en este periodo (9,3%, lo que supone más de 1,38 millones de personas), y al hecho de que las horas efectivas por cada cotizante son un 0,6% superiores a los niveles prepandemia.
Tal y como se puede observar en el siguiente gráfico, la evolución que muestra este índice es muy similar al obtenido con los datos correspondientes a la de Encuesta Trimestral de Coste Laboral (ETCL) del INE, que muestra un incremento del 9,5% en las horas efectivas trabajadas respecto al periodo prepandemia.. Sin embargo, estos resultados son significativamente más altos que los observados en los últimos datos disponibles de las estadísticas de la Encuesta de Población Activa (EPA) y de la Contabilidad Nacional Trimestral (CNTR), según las cuales en el primer trimestre de 2024 las horas efectivas trabajadas apenas habrían aumentado un 3,5% y 2,4%, respectivamente, respecto al nivel previo a la pandemia. Se observa también que se produce una ruptura de la relación de estas series a partir de finales de 2021.