La Guardia Civil y Policía Nacional han detenido a un total de 15 personas por su supuesta participación en una organización criminal dedicada al tráfico de drogas, tenencia ilícita de armas y detención ilegal.
La operación ITÁLICAFORZA-FLANAGAN, iniciada en febrero de este año, se inició tras el hallazgo de dos ciudadanos italianos heridos y desorientados en el Palmar de Troya (Sevilla), los cuales habían sido detenidos ilegalmente a la fuerza, amenazados con un arma corta (pistola) y llevados a la fuerza a una finca aislada, donde sufrieron agresiones, sustrayéndoles gran cantidad de dinero.
Esto dio inicio a una investigación que se ha extendido por ocho meses, llegando a la conclusión los agentes que lo había acontecido, era lo que se conoce como un "VUELCO". Un vuelco en el argot del narcotráfico, se refiere a un robo violento entre bandas criminales, donde una organización se apropia de la droga o dinero de otra mediante la fuerza.
Desde entonces, las fuerzas de seguridad han trabajado de forma conjunta para desmantelar una red criminal que operaba en diferentes partes del territorio nacional.
Según las investigaciones de los agentes, la organización contaba con varias ramas en Utrera (Sevilla), Estepona-Fuengirola (Málaga) y Maó (Menorca). La colaboración entre la Policía Judicial de Utrera y el Grupo de Estupefacientes de Maó fue clave para identificar y seguir los movimientos de esta red. La organización se dedicaba a la importación de hachís, la exportación de marihuana y la distribución de cocaína en las Islas Baleares, bajo una estructura organizada con su jefatura en Italia.
Tras meses de vigilancia, se realizaron registros en distintas localidades de Sevilla y Menorca, donde se incautaron 180 kg de hachís, plantaciones de marihuana, cocaína, material para envasar, balanzas de precisión, dinero en efectivo y joyas de alto valor. También se decomisaron varias armas de fuego, tanto legales como ilegales, incluidas escopetas recortadas y pistolas modificadas, junto con munición de diferentes calibres.
En total, 15 personas fueron detenidas, concretamente diez en Utrera y cinco en Menorca. De estos detenidos, nueve han sido enviados a prisión provisional tras la puesta a disposición judicial. La operación ha sido posible gracias a la cooperación efectiva de la Guardia Civil y la Policía Nacional, que lograron desmantelar gran parte de la organización.
La investigación sigue abierta y no se descartan nuevas detenciones.