Un grupo de investigadores y docentes de la Universidad de Granada del ámbito de la Enfermería, Fisioterapia y Terapia Ocupacional, coordinados por la profesora María Correa Rodríguez, ha publicado un artículo en Nurse Education in Practice, una de las revistas internacionales de referencia en el área de la educación en enfermería, en el que determina la efectividad del 'debriefing' o análisis post-simulación asistido por video en estudiantes de ciencias de la salud. El artículo lleva por título Effectivenes of video-assisted debriefing versus oral debriefing in simulation-based Interdisciplinary health professions education: A randomized trial. (Eficacia del análisis post-simulación asistido por video frente al oral en la educación interdisciplinaria de profesiones sanitarias basada en simulación: un ensayo aleatorizado, en español) y es el resultado del proyecto de innovación docente "La simulación clínica como herramienta docente para el manejo de casos clínicos basados en la COVID-19 para estudiantes de ciencias de la salud: efectividad del debriefing asistido por video" (20-84) que fue financiado en la Convocatoria de Proyectos de Innovación Docente y Buenas Prácticas del Plan FIDO 2020-2022 de la Universidad de Granada.
La simulación clínica es una metodología educativa consistente en la representación de escenarios clínicos de la práctica sanitaria habitual que facilita la adquisición de competencias clínicas en un entorno controlado y seguro. La simulación clínica debe ligarse a un análisis posterior de la experiencia denominado debriefing en el que se reflexiona sobre la actuación del alumnado y se analizan los errores, convirtiéndose en el principal motor de aprendizaje, mejora y cambio. Además del tradicional debriefing oral, se han propuesto otras estrategias que pueden sumarse para aumentar el aprendizaje y logro de competencias clínicas, como el debriefing asistido por video. No obstante, las diferencias entre los diferentes métodos (debriefing verbal versus asistido por video) no eran concluyentes, precisándose de nuevas experiencias que evaluasen ambos modelos. Además, en la situación sanitaria causada por la pandemia era de vital importancia formar al estudiantado de ciencias de la salud, como futuros profesionales sanitarios, sobre las medidas de seguridad necesarias para el cuidado de los pacientes con COVID-19. En este contexto, la implantación de la simulación clínica facilitó el aprendizaje pre-clínico en base al diseño de un escenario de simulación basado en un paciente con COVID-19 en el que los estudiantes tuvieron que manejar los equipos de protección personal (EPI) y los protocolos básicos en el manejo clínico de estos pacientes.
El objetivo del trabajo ha sido comparar la capacidad de reflexión, el nivel de ansiedad, así como la satisfacción percibida por el estudiantado al utilizar una metodología de debriefing tradicional frente al asistido por video después de un escenario de simulación clínica en una cohorte de alumnos de los Grados de Enfermería, Fisioterapia y Terapia Ocupacional de la Facultad de Ciencias de la Salud. El escenario de simulación propuesto conllevaba un correcto manejo de los Equipos de Protección Individual (EPIs) que son de vital importancia para los profesionales de la salud ya que desempeñan un papel fundamental en la prevención y protección frente a enfermedades infecciosas, tal y como se puso de manifiesto en la pandemia por la COVID-19.
Los resultados del trabajo respaldan la efectividad del debriefing asistido por video frente al debriefing tradicional al mejorar la capacidad de reflexión y la satisfacción percibida de los estudiantes sin aumentar el nivel de ansiedad. Por lo tanto, los autores concluyen que el debriefing asistido por video debería ser la metodología del elección tras un escenario de simulación clínica al resultar ser más efectivo para la identificación de brechas en el aprendizaje.