La Guardia Civil continúa asediando el cultivo y el tráfico de marihuana en toda la provincia de Granada. En esta ocasión ha sido en dos viviendas, una en Padul y otra en Las Gabias, donde los agentes de esta última localidad, en el marco de la operación Ganavas, han desarticulado dos centros de producción de marihuana y se han incautado de 689 plantas de cannabis sativa y de 385 gramos de marihuana dispuesta para la venta.
Dos personas han sido detenidas como presuntas autoras de un delito de cultivo y elaboración de droga y de un delito de defraudación de electricidad.
La Guardia Civil, en el marco de la colaboración que mantiene con la compañía eléctrica Endesa en la provincia de Granada, sigue poniendo el foco en localizar enganches ilegales a la red eléctrica, un hecho que provoca numerosos problemas como apagones sistemáticos o incendios, además de que frecuentemente constituye un indicio de que detrás de estos enganches puedan encontrarse centros de cultivo de marihuana.
De este modo, con la ayuda de los técnicos de esta compañía, la Guardia Civil supo que existían dos acometidas ilegales a la red eléctrica en una vivienda de Padul y en otra de Las Gabias.
Los operarios de Endesa llevaron a cabo una serie de mediciones y constataron que en las dos casas había un alto consumo de electricidad, muy superior al habitual para una vivienda, lo que constituía para los agentes de la Guardia Civil un indicio claro de que en ellas se podía estar cultivando cannabis sativa.
Tras obtener la autorización judicial para registrar las viviendas sospechosas, la Guardia Civil procedió a los dos registros.
En el registro realizado en Paul los agentes intervinieron 414 plantas de cannabis sativa en avanzado estado de crecimiento distribuidas en tres habitaciones que el propietario había habilitado, dos en la planta baja y una en la segunda planta de la vivienda.
En el registro realizado en Las Gabias, los investigadores descubrieron 275 plantas de cannabis sativa que crecían en dos habitaciones que el propietario de la vivienda había habilitado en la planta superior de la casa; mientras que en la cocina descubrieron varios botes de cristal con 385 gramos de marihuana dispuesta para la venta.
Mientras esto ocurría, los operarios de Endesa aprovecharon la seguridad que les ofrecía el despliegue de la Guardia Civil para desmantelar los dos enganches ilegales a la red eléctrica descubiertos.
Esta operación de la Guardia Civil se incardina en la operación Miller, una operación que está desarrollando la Guardia Civil a nivel nacional contra el cultivo y tráfico ilegal de marihuana.