El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) y el Programa Mundial de Alimentos (PMA) piden una acción inmediata para proteger a los niños y familias atrapados en la escalada de violencia en el este de la República Democrática del Congo (RDC), donde un número cada vez mayor de personas, incluidos niños, han resultado heridas o han muerto cerca de campamentos improvisados. Ambas agencias piden a todas las partes en conflicto que den prioridad a la protección de los civiles y permitan a las agencias humanitarias realizar su trabajo.
El último conflicto en el este del país ha provocado condiciones catastróficas para la población local. En las últimas dos semanas, los intensos combates se han desplazado 25 kilómetros al oeste de Goma, hacia la ciudad de Sake, donde los niños y sus familias se encuentran atrapados en un mortífero fuego cruzado.
"Los niños y niñas de RDC necesitan paz ya", ha señalado Grant Leaity, representante de UNICEF en la República Democrática del Congo. "Pedimos que se proteja a los niños en esta guerra y que se ponga fin a esta violencia mediante esfuerzos renovados para encontrar una solución diplomática. Estamos extremadamente preocupados por la seguridad de los niños, las niñas y sus familias en los campamentos de Goma y sus alrededores."
Esto ha desencadenado un enorme desplazamiento de personas hacia los campos de desplazados, ya masificados. Otras 214.950 personas se han sumado a las 500.000 ya desplazadas a zonas próximas a Goma. Por otra parte, decenas de miles de personas se desplazaron hacia Minova, en Kivu del Sur.
Se han cortado rutas terrestres cruciales para facilitar la entrega de alimentos y otros suministros, lo que ha provocado escasez y subidas de precios en los mercados locales de Goma. La situación pone aún más en aprietos a las familias que luchan por llevar comida a sus mesas.
"Nos enfrentamos a una catástrofe humanitaria de proporciones masivas", ha declarado Peter Musoko, director y representante del PMA en la República Democrática del Congo (RDC). "No se equivoquen: si no actuamos ahora, se perderán vidas".
El aumento de la violencia y los desplazamientos está poniendo a prueba los recursos de ambos organismos para organizar una respuesta integral que incluya alimentos, agua potable, buen saneamiento, refugios seguros, atención sanitaria básica y servicios de protección para mujeres, niños y niñas.
El PMA solicita 300 millones de dólares (alrededor de 276,9 millones de euros) para los próximos 6 meses. Con una interrupción urgente de recursos a partir de marzo, la agencia necesita 78 millones de dólares (71,99 millones de euros) inmediatamente para cubrir este déficit y continuar sus operaciones.
Para los próximos 6 meses, UNICEF solicita 400 millones de dólares (369,1 millones de euros) para su respuesta de emergencia en el este de la RDC, con una necesidad inmediata de 96 millones de dólares (88,6 millones de euros). Las prioridades urgentes tras esta reciente afluencia de personas incluyen el despliegue de clínicas móviles para proporcionar atención médica de emergencia y servicios de nutrición en los campamentos y sus alrededores, reforzar la contención y prevención del cólera, distribuir artículos no alimentarios, aumentar el transporte de agua en camiones cisterna, atender a los niños y niñas no acompañados y reunirlos con sus familias, y proporcionar servicios para prevenir y responder a los casos de violencia de género.
República Democrática del Congo se ha convertido en una de las crisis de desplazamiento interno más importantes del continente, con 6,9 millones de personas desplazadas, principalmente a causa del conflicto en el este. Solo en el último año, la OIM calcula que se han desplazado 1,6 millones de personas.