En los considerandos de la resolución, el Consejo Superior manifestó su: "Preocupación por la jerarquización de la actividad, incluyendo la justa retribución por la tarea realizada, y respalda el reclamo salarial de los trabajadores y las trabajadoras nodocentes, de manera permanente".
Además, señaló que "En lo que va del corriente año el poder adquisitivo de los salarios de sus trabajadores ha registrado una pérdida real en torno al 40%".
Por lo tanto, se dispuso "Declarar la emergencia en materia salarial de todos los trabajadores y trabajadoras docentes y nodocentes de esta Universidad en todas sus funciones, incluyendo los profesionales de la salud y las tareas vinculadas a investigación y extensión universitaria".
Desde el comienzo del presente año las representaciones gremiales docentes y nodocentes -APUBA y ADUBA- han venido llevado un reclamo constante sobre esta situación. El pasado 4 de julio se emitió un comunicado en conjunto entre las representaciones gremiales docentes y nodocentes, el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) y la Federación Universitaria Argentina, marcando la alerta de la crítica situación que se está atravesando en materia salarial en todo el sistema universitario nacional.
El reclamo por la recomposición salarial del sector fue una de las consignas centrales de la masiva Marcha Federal Universitaria realizada el pasado 23 de abril.