Guía de San Pedro Alcántara
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La desnutrición aguda está aumentando rápidamente en las zonas controladas por el Gobierno de Yemen (GoY), y las áreas de la región de la Costa Oeste experimenta niveles "extremadamente críticos" por primera vez, dijo hoy el Grupo de trabajo técnico de la Clasificación Integrada de la Seguridad Alimentaria en Fases (CIF) en Yemen.
Según el último análisis de desnutrición aguda de la CIF, el número de niños menores de cinco años que sufren desnutrición aguda, o emaciación, aumentó un 34 por ciento en comparación con el año anterior en las zonas controladas por el GoY, lo que afecta a más de 600.000 niños, incluidos 120.000 niños que padecen desnutrición aguda grave. El marcado aumento se debe al efecto combinado de los brotes de enfermedades (cólera y sarampión), la elevada inseguridad alimentaria, el acceso limitado al agua potable y el declive económico. Además, en la misma zona geográfica de actuación, se detectó que alrededor de 223.000 mujeres embarazadas y lactantes padecían desnutrición aguda en 2024.
El nivel más grave de la clasificación de desnutrición aguda de la CIF (CIF AMN), la desnutrición aguda extremadamente crítica (fase 5 de la CIF AMN), se aplica a las zonas donde la prevalencia de la desnutrición aguda supera el 30%. Por primera vez, se informó de este nivel en las tierras bajas del sur de Hodeidah (distritos de Al Khawkhah y Hays) y las tierras bajas de Taiz (distrito de Al Makha) durante el período de noviembre de 2023 a junio de 2024. En Hodeidah, la prevalencia de la desnutrición aguda se disparó al 33,9% desde el 25,9% interanual.
Se prevé que de julio a octubre de 2024 (los meses de temporada de escasez, cuando la actividad agrícola es mínima), los 117 distritos de las zonas controladas por el GoY que se incluyen en la encuesta experimenten niveles "graves" de desnutrición aguda o peores (fase 3+ de desnutrición aguda de la CIF), y también se prevé que el distrito de Mawza, en las tierras bajas de Taiz, pase al nivel extremadamente crítico (fase 5 de la CIF de desnutrición aguda).
"El aumento alarmante de la desnutrición aguda entre los niños menores de 5 años en las zonas del Gobierno del Yemen subraya el grave impacto de los brotes de enfermedades, la alta inseguridad alimentaria y el escaso acceso a los servicios esenciales. La FAO sigue comprometida a apoyar la restauración y diversificación sostenibles de los medios de vida agrícolas para ayudar a abordar las necesidades urgentes", afirmó el Dr. Hussein Gadain, Representante de la FAO en Yemen.
Yemen, sumido en un conflicto prolongado y un colapso económico, ha estado luchando contra una de las tasas de desnutrición más altas del mundo. El conflicto en curso, la inestabilidad económica y los brotes recurrentes de enfermedades siguen siendo los principales impulsores de la crisis de desnutrición del país.
Hodeidah y Taiz, las zonas con la mayor prevalencia de desnutrición aguda, ya se enfrentaban a la mayor tasa de retraso del crecimiento o desnutrición crónica. Esto implica que las privaciones repetidas también están agravando la desnutrición crónica entre los niños y niñas de estas zonas.
"Actualmente, el PMA se ve obligado a proporcionar raciones de menor tamaño y estos datos deberían ser una llamada de atención sobre la posibilidad de que haya vidas en juego", dijo Pierre Honnorat, Representante y Director de País del PMA en Yemen. "Es fundamental aumentar el apoyo a los más vulnerables, que podrían hundirse aún más en la inseguridad alimentaria y la desnutrición si persisten los bajos niveles actuales de financiación humanitaria", añadió.
El Dr. Arturo Pesigan, Representante de la OMS en Yemen, afirmó: "El creciente nivel de desnutrición aguda en niños menores de 5 años en Yemen también indica que las enfermedades son motivo de preocupación. Los servicios integrados de salud y nutrición, incluida la gestión de enfermedades infantiles y para garantizar la inmunización actualizada y prácticas de alimentación adecuadas, son cruciales para abordar las emergencias de salud y nutrición. Esto se suma a garantizar el acceso a alimentos nutritivos suficientes y agua potable segura. Los actores humanitarios y la comunidad internacional deben tomar medidas inmediatas para salvaguardar el futuro de los niños de Yemen".
Las enfermedades infantiles, junto a los brotes de cólera y sarampión, además del acceso limitado a agua potable y a servicios de saneamiento, están aumentando las tasas de desnutrición aguda en Yemen. La inseguridad alimentaria grave y las prácticas de alimentación deficientes, incluidas las prácticas de lactancia materna subóptimas, están empeorando aún más la situación entre los niños vulnerables en las áreas controladas por el Gobierno del Yemen.
Los cuatro organismos de las Naciones Unidas piden apoyo internacional urgente y sostenido, así como una acción inmediata para abordar las causas profundas de la desnutrición aguda, mediante el fortalecimiento de los sistemas existentes de protección social, salud, alimentos y agua, saneamiento e higiene. Al mismo tiempo, es fundamental poner fin a un conflicto que dura casi una década y restablecer la paz para abordar los desafíos y fortalecer la resiliencia del pueblo yemení, devastado por la falta de servicios básicos, los desplazamientos reiterados y los sistemas económicos y sociales destrozados.
Aden, Yemen, Madrid. 18 de agosto de 2024 – La desnutrición aguda está aumentando rápidamente en las zonas controladas por el Gobierno de Yemen (GoY), y la costa oeste experimenta niveles "extremadamente críticos" por primera vez, dijo hoy el Grupo de trabajo técnico de la Clasificación Integrada de la Seguridad Alimentaria en Fases (CIF) en Yemen.
Según el último análisis de desnutrición aguda de la CIF, el número de niños menores de cinco años que sufren desnutrición aguda, o emaciación, aumentó un 34 por ciento en comparación con el año anterior en las zonas controladas por el GoY, lo que afecta a más de 600.000 niños, incluidos 120.000 niños que padecen desnutrición aguda grave. El marcado aumento se debe al efecto combinado de los brotes de enfermedades (cólera y sarampión), la elevada inseguridad alimentaria, el acceso limitado al agua potable y el declive económico. Además, en la misma zona geográfica de actuación, se detectó que alrededor de 223.000 mujeres embarazadas y lactantes padecían desnutrición aguda en 2024.
El nivel más grave de la clasificación de desnutrición aguda de la CIF (CIF AMN), la desnutrición aguda extremadamente crítica (fase 5 de la CIF AMN), se aplica a las zonas donde la prevalencia de la desnutrición aguda supera el 30%. Por primera vez, se informó de este nivel en las tierras bajas del sur de Hodeidah (distritos de Al Khawkhah y Hays) y las tierras bajas de Taiz (distrito de Al Makha) durante el período de noviembre de 2023 a junio de 2024. En Hodeidah, la prevalencia de la desnutrición aguda se disparó al 33,9% desde el 25,9% interanual.
Se prevé que de julio a octubre de 2024 (los meses de temporada de escasez, cuando la actividad agrícola es mínima), los 117 distritos de las zonas controladas por el GoY que se incluyen en la encuesta experimenten niveles "graves" de desnutrición aguda o peores (fase 3+ de desnutrición aguda de la CIF), y también se prevé que el distrito de Mawza, en las tierras bajas de Taiz, pase al nivel extremadamente crítico (fase 5 de la CIF de desnutrición aguda).
"El informe confirma una tendencia alarmante de desnutrición aguda de los niños en el sur del Yemen", dijo el Representante de UNICEF en Yemen, Peter Hawkins. "Para proteger a las mujeres, niñas y niños más vulnerables, es más importante que nunca invertir en la prevención y el tratamiento y ampliarlos. Seguiremos haciendo todo lo posible, incluso aprovechando la respuesta multisectorial existente para luchar contra las formas de desnutrición que amenazan la vida, de modo que los niños puedan sobrevivir y crecer hasta alcanzar su máximo potencial", añadió.
"El aumento alarmante de la desnutrición aguda entre los niños menores de 5 años en las zonas del Gobierno del Yemen subraya el grave impacto de los brotes de enfermedades, la alta inseguridad alimentaria y el escaso acceso a los servicios esenciales. La FAO sigue comprometida a apoyar la restauración y diversificación sostenibles de los medios de vida agrícolas para ayudar a abordar las necesidades urgentes", afirmó el Dr. Hussein Gadain, Representante de la FAO en Yemen.
Yemen, sumido en un conflicto prolongado y un colapso económico, ha estado luchando contra una de las tasas de desnutrición más altas del mundo. El conflicto en curso, la inestabilidad económica y los brotes recurrentes de enfermedades siguen siendo los principales impulsores de la crisis de desnutrición del país.
Hodeidah y Taiz, las zonas con la mayor prevalencia de desnutrición aguda, ya se enfrentaban a la mayor tasa de retraso del crecimiento o desnutrición crónica. Esto implica que las privaciones repetidas también están agravando la desnutrición crónica entre los niños y niñas de estas zonas.
"Actualmente, el PMA se ve obligado a proporcionar raciones de menor tamaño y estos datos deberían ser una llamada de atención sobre la posibilidad de que haya vidas en juego", dijo Pierre Honnorat, Representante y Director de País del PMA en Yemen. "Es fundamental aumentar el apoyo a los más vulnerables, que podrían hundirse aún más en la inseguridad alimentaria y la desnutrición si persisten los bajos niveles actuales de financiación humanitaria", añadió.
El Dr. Arturo Pesigan, Representante de la OMS en Yemen, afirmó: "El creciente nivel de desnutrición aguda en niños menores de 5 años en Yemen también indica que las enfermedades son motivo de preocupación. Los servicios integrados de salud y nutrición, incluida la gestión de enfermedades infantiles y para garantizar la inmunización actualizada y prácticas de alimentación adecuadas, son cruciales para abordar las emergencias de salud y nutrición. Esto se suma a garantizar el acceso a alimentos nutritivos suficientes y agua potable segura. Los actores humanitarios y la comunidad internacional deben tomar medidas inmediatas para salvaguardar el futuro de los niños de Yemen".
Las enfermedades infantiles, junto a los brotes de cólera y sarampión, además del acceso limitado a agua potable y a servicios de saneamiento, están aumentando las tasas de desnutrición aguda en Yemen. La inseguridad alimentaria grave y las prácticas de alimentación deficientes, incluidas las prácticas de lactancia materna subóptimas, están empeorando aún más la situación entre los niños vulnerables en las áreas controladas por el Gobierno del Yemen.
Los cuatro organismos de las Naciones Unidas piden apoyo internacional urgente y sostenido, así como una acción inmediata para abordar las causas profundas de la desnutrición aguda, mediante el fortalecimiento de los sistemas existentes de protección social, salud, alimentos y agua, saneamiento e higiene. Al mismo tiempo, es fundamental poner fin a un conflicto que dura casi una década y restablecer la paz para abordar los desafíos y fortalecer la resiliencia del pueblo yemení, devastado por la falta de servicios básicos, los desplazamientos reiterados y los sistemas económicos y sociales destrozados.
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