El impacto consecutivo de los tifones Kristine y Leon ha causado daños generalizados en Filipinas y ha dejado a miles de familias y niños sin acceso a agua potable ni a servicios de saneamiento, además de interrumpir las clases de 20 millones de estudiantes.
La tormenta tropical Kristine y el súper tifón Leon, conocidos internacionalmente como "Trami" y "Kong-rey", son el undécimo y duodécimo ciclón tropical en golpear Filipinas este año, y han devastado 13 regiones y 29 provincias, afectado al menos a 4,2 millones de personas – aproximadamente 1,3 millones de niños y niñas – y obligado a desplazarse a más de 300.000 personas.
Las tormentas tropicales Marce (Yinxing) y Nika (Toraji) afectaron casi a las mismas zonas durante el fin de semana, y ya se está formando un nuevo fenómeno meteorológico que se llamará Ofel (Man-Yi). Por ello, el gobierno filipino ha intensificado su respuesta mientras las comunidades se preparan para el impacto de más fenómenos climáticos extremos, los cuales se ven exacerbados por la crisis climática.
"No podemos enfatizar lo suficiente la importancia de los suministros de emergencia para salvar vidas durante y después de una emergencia," ha dicho Oyunsaikhan Dendevnorov, representante de UNICEF en Filipinas. "Estamos trabajando con nuestros aliados para proporcionar suministros de agua, saneamiento e higiene a las familias y niños y niñas afectados para asegurar su acceso a servicios esenciales que ayuden a prevenir la propagación de enfermedades".
Antes de la emergencia, la cobertura y el acceso a servicios básicos de agua y saneamiento ya era baja en las zonas afectadas. El impacto de los fuertes tifones ha agravado aún más la situación en las comunidades, donde se han registrado casos de defecación al aire libre.
Desde el 31 de octubre, UNICEF y sus aliados han entregado kits de higiene y kits de agua a 2.950 familias -de un objetivo de 3.300 familias- en las zonas más afectadas de las provincias de Camarines Sur y Albay, en la Región de Bicol. En colaboración con Acción Contra el Hambre y Plan International Filipinas, en los próximos días se entregarán kits de higiene y agua a 350 familias más.
En colaboración con las Divisiones Escolares del Departamento de Educación de Camarines Sur y Albay, UNICEF distribuirá suministros educativos a 14.594 estudiantes y 765 maestros en 25 escuelas y cinco Centros de Desarrollo Comunitario. Los escolares y docentes afectados recibirán 3.261 kits, así como 32 kits de atención y desarrollo infantil temprano y 38 kits recreativos. También recibirán 25 "Escuelas en una maleta", cada una de las cuales contiene suministros y materiales para apoyar a un docente y 40 estudiantes.
El Departamento de Educación estima que al menos 500 escuelas en la Región de Bicol necesitan ayuda.
"Garantizar que el aprendizaje de los niños no se interrumpa es una prioridad para UNICEF," ha afirmado Akihiro Fushimi, jefe de Educación de UNICEF Filipinas. "UNICEF insta a que las escuelas se mantengan como espacios dedicados a la educación y no se utilicen como centros de evacuación, para que los niños y niñas sigan aprendiendo en un ambiente estable".