La consellera de Salud y Consumo, Patricia Gómez, que ha comparecido en el Parlamento a petición propia y por decimoséptima vez para explicar la gestión de la pandemia de COVID-19, ha destacado que Balears registra la tasa de letalidad acumulada más baja del Estado. Este indicador, que muestra la proporción de muertes que se producen entre las personas contagiadas, es del 0,5 %, mientras que la media estatal es del 0,9 % y hay comunidades que multiplican por tres el dato de Balears. En total, en las islas se han registrado 248.682 casos y 1.206 muertos.
Durante su exposición, la consellera ha recordado que la sexta ola ha supuesto un estallido de casos debido a la irrupción, a nivel mundial, de la variante ómicron, más transmisible que su predecesora, la delta. Por eso, se han producido más casos que en el conjunto de todas las anteriores. En total, desde el 18 de octubre, se han contabilizado 150.000 casos y 190 exitus. Por lo tanto, en esta sexta ola, la letalidad baja hasta el 0,1 %.
Estos datos, ha manifestado la consellera, demuestran la eficacia de las vacunas y también el compromiso y el espíritu cívico de la ciudadanía de las islas, que se ha involucrado de forma individual y colectiva en la lucha contra la pandemia.
Gómez ha resaltado que las Illes Balears han estado mayoritariamente por debajo de la media española en cuanto a la incidencia acumulada, tanto a 14 como a 7 días. Además, la situación epidemiológica ha mejorado de forma evidente durante el mes de febrero en las islas. La IA 14 ha pasado de 2.819 casos por cada 100.000 habitantes del día 1 a 1.165 el 14 de febrero. También ha mejorado la situación hospitalaria: de 89 personas en UCI y 404 ingresadas en planta que había el 1 de febrero a 56 en UCI y 300 en planta hoy mismo.
Así, en las dos últimas semanas, prácticamente todos los indicadores han tenido un descenso del 40 %: la tasa de positividad, el número de casos y la incidencia acumulada.
Capacidad de detección y adaptación de los circuitos
En cuanto a la sexta ola, la consellera ha remarcado que la muy buena capacidad del Laboratorio de Microbiología de Son Espases para detectar nuevas variantes ha permitido que Balears fuera una de las primeras comunidades en informar de la llegada de ómicron y adaptar las estrategias de diagnóstico y rastreo, nuevamente y rápidamente, así como volver a aplicar los planes de contingencia asistenciales.
«Hemos creado nuevos circuitos para el diagnóstico, hemos abierto nuevas líneas para realizar pruebas, hemos sustituido las PCR por test de antígenos, hemos puesto en marcha una nueva web para la autogestión de la COVID y la tramitación de las bajas laborales», ha citado la consellera, quien también se ha referido al convenio con el Colegio de Farmacéuticos a partir del que casi 200 oficinas de farmacia ofrecen supervisar y comunicar al Servicio de Salud los autotest de la ciudadanía.
«Estas acciones, que parecen sencillas, suponen una gran cantidad de cambios en los protocolos, ya complejos de por sí, y por ello quiero dar las gracias a todos los implicados en su desarrollo y a toda la ciudadanía por su capacidad de adaptación. La implicación de todos ha sido fundamental para mitigar el impacto de la pandemia», ha reiterado.
Gómez también ha resaltado la importante labor que se ha realizado para el control de la propagación de la pandemia en las residencias de personas mayores.
La vacunación pediátrica, una prioridad
Gómez ha manifestado que una prioridad ha sido fomentar la vacunación pediátrica. A finales de diciembre se abrió a los niños de 9, 10 y 11 años y la primera semana de enero, a los de 5 a 10.
Además, para favorecer el acceso, se han abierto nuevos puntos de vacunación masiva. En Palma, el Espacio Francesc Quetglas, y nuevas líneas en Son Dureta. En Manacor, un recinto en el centro de la ciudad. En Inca, una instalación en el aparcamiento del Centro de Salud So Na Monda.
Estas iniciativas han ido acompañados de acciones como el envío de información a los centros educativos, la entrega de un certificado de valentía a los más pequeños y la participación de Sonrisa Médica para animar los puntos de vacunación infantil.
Por otro lado, desde el lunes de la semana pasada, la ciudadanía puede vacunarse sin cita previa de las primeras y terceras dosis y el vacubús ha administrado más de 5.000 dosis contra la COVID-19 en Palma, Calvià, Inca, Manacor, sa Pobla y Consell.
«Aprovecho para dar las gracias al ejército por poner a disposición de las Illes Balears 90 personas para el rastreo y hasta 10 equipos militares para la vacunación, de los que desde ayer quedan 5 en activo con 18 militares”, ha remarcado.
La consellera Gómez ha manifestado que la vacunación ha sido clave para que el impacto de la sexta ola en la salud de las personas haya sido menor en términos proporcionales de hospitalización y defunciones que en olas anteriores.
También ha advertido: «Las personas mayores de 60 años no vacunadas continúan teniendo 54 veces más probabilidades de ingresar en una unidad de cuidados intensivos que las que llevan la dosis de refuerzo contra la COVID-19, según datos de 31 de enero. En el tramo de 70 a 79 años, la diferencia es todavía superior. Los no vacunados tienen 64 veces más probabilidades de ingresar en UCI que los que han recibido la dosis de refuerzo».
Continuidad de otros proyectos fundamentales
Durante la comparecencia, Gómez ha destacado que, a pesar de las dificultades que ha supuesto la pandemia —que ha obligado a reordenar los recursos y priorizar proyectos—, se ha continuado avanzando en cuestiones fundamentales.
En materia asistencial, ha destacado que se sigue implementando el plan de choque para reducir la demora asistencial, con el compromiso de reducirla un 20 % a lo largo de este año. Asimismo, se ha referido a la puesta en marcha del trasplante de hígado en Son Espases; la apertura de un nuevo centro de atención pediátrica en la barriada de Pere Garau, en Palma; la ampliación de la UCI de Son Llàtzer, la nueva zona de urgencias respiratorias del Hospital Comarcal de Inca, y el Plan contra el Suicidio de las Islas Baleares, que se presenta mañana, jueves.
En cuanto a las mejoras en salud pública, sigue adelante la creación de la Agencia de Salud Pública y pronto se pondrá en marcha plataforma digital EinaSalut, para cuidar de la propia salud, además de haber ampliado el programa de cribado de cáncer de colon.
Respecto a infraestructuras, ha remarcado que la pandemia no ha impedido continuar trabajando para renovar la red hospitalaria y de atención primaria con la reforma del Hospital Comarcal de Inca, del Hospital de Manacor, del antiguo Hospital Can Misses, del Hospital General de Palma, del Verge del Toro de Maó y del Parque Sanitario de Bons Aires. También el proyecto de Son Dureta ha quedado en exposición pública recientemente, y está en marcha un concurso para 9 centros de salud en Mallorca.
En lo que se refiere a los profesionales sanitarios, a quienes ha vuelto a felicitar y dar las gracias por su labor durante la pandemia, el Servicio de Salud continúa desarrollando las ofertas de empleo público y el plan de estabilización, que convertirá a 2.305 profesionales sanitarios eventuales en interinos.
La consellera Patricia Gómez ha concluido su exposición recordando que ahora, 740 días después de la detección del primer caso de SARS-CoV-2 en Balears, las islas empiezan a superar la situación gracias a la colaboración de una amplia mayoría social, gracias al civismo, gracias al trabajo de los profesionales sanitarios y gracias a la ciencia.