Agentes de la Policía Nacional adscritos al Grupo de Estupefacientes de la Comisaría Provincial de Jaén, han detenido a dos hombres y una mujer, de nacionalidad colombiana y española, de entre 24 y 50 años de edad, ninguno de ellos con antecedentes previos, como presuntos autores de un delito de tráfico de drogas. Los agentes habrían desarticulado dos puntos de venta de droga, lo que en el argot policial se conoce este tipo de ventas como "Telecoca", término que se utiliza para designar puntos de venta itinerantes en lo que el suministrador se desplaza a demanda a cualquier punto de la ciudad para facilitar la dosis al comprador, funcionando del mismo modo que un establecimiento de reparto a domicilio. En ambos puntos, los investigados aprovechaban la ubicación céntrica de las viviendas para pasar desapercibidos y dificultar la investigación policial. Concertaban la cita previamente con el cliente y desplazaban hasta el lugar indicado tanto en patinete como en vehículo, tomando fuertes medidas de seguridad en el trayecto. Ambas operaciones se llevaron a cabo con apenas 72 horas de diferencia, concluyendo con la incautación de un total de 170 grs de cocaína, 565 grs de marihuana y 180 grs de hachís, además de 7.200€ de dinero en efectivo y gran variedad de útiles para la confección de las dosis. A escasos días del comienzo de la Feria de "San Lucas", festividad que congregará a miles de personas en la ciudad, los agentes han desmantelado dos puntos de venta de sustancias estupefacientes en los que los detenidos se estarían abasteciendo de droga para su posterior venta. La Autoridad Judicial decretó el ingreso en prisión para uno de los hombres.
Una de las funciones principales de los agentes destinados en el Grupo de Estupefacientes de la Comisaría Provincial de Jaén es la de investigar, localizar, identificar y posteriormente detener, a las personas que se puedan estar lucrando vendiendo sustancias estupefacientes, es por esto que en el momento en el que los agentes recibieron información relativa a la posible existencia de personas en la ciudad que, podrían estar dedicando al tráfico de sustancias estupefacientes a pequeña escala en sus viviendas y en vista de que se pudieran estar abasteciendo ante la proximidad de la celebración de la Feria de San Lucas en la capital, es por lo que se pusieron manos a la obra dando comienzo a una investigación al objeto de comprobar la veracidad de la información recibida y, llegado el momento, una vez comprobado que, efectivamente, estas persona estarían llevando a cabo tal actividad ilegal proceder a su detención y puesta a disposición de la autoridad competente.
En primer lugar los agentes, y como punto coincidente en ambas investigaciones, establecieron diversas vigilancias próximas a las viviendas de los investigados, en las cuales se detectó, sin ningún género de dudas, a los investigados desplazándose en diferentes horas y días a lugares para vender la sustancia estupefaciente a requerimiento del cliente.
Un punto de venta en la zona centro, próximo a centros escolares y zonas de ocio infantiles
Ambas investigaciones se llevaron a cabo de forma paralela, sin embargo, ambas coincidían respecto a la forma de vender las dosis, y es que en ambos puntos de venta, los clientes concertaban la cita con los investigadores de previamente de forma telefónica y éstos, en patinete eléctrico – en el primer caso – o conduciendo su vehículo particular en el segundo, se desplazaban hasta el punto donde habían concretado la cita y llevaban a cabo la venta.
Gracias al resultado que arrojaban las vigilancias llevadas a cabo por los investigadores, estos confirmaron de forma fehaciente la actividad ilícita que estarían desarrollando en sus viviendas, prueba de ello son el ubicar a los detenidos, durante varias semanas y a diferentes días y tramos horarios, conduciendo sus vehículos adoptando medidas de seguridad tales como mirar hacia todos lados en actitud nerviosa a la salida y entrada a su domicilio, realizar cambios repentinos de dirección , circular en dirección prohibida o incluso tomar vías menos directas para llegar al destino, todo ello con objeto de evitar los seguimientos policiales y ser detectada la actividad ilícita.
El objetivo principal de los presuntos autores de este hecho no es otro que seguir lucrándose de esta actividad, para lo cual intentan pasar desapercibidos y poder hacer la estrega de la sustancia estupefaciente de la manera más discreta posible
Sin embargo, la dilatada experiencia de los investigadores que se dedican a investigar este tipo de hechos les hace "estudiar" no solo la actividad que desarrollan los autores, sino que también examinan el contexto en el que viven y en ese momento es cuando adquiere un peso importante el hecho de que ninguno de los tres investigados tenga una fuente de ingresos fija que le permita vivir acorde al tipo de vida que llevan; lo que supone pagar unos costes de alquiler y manutención que se hacen difíciles de afrontar sin unos ingresos periódicos: deben de tener una fuente de ingresos alternativa que les esté facilitando un buen nivel de vida.
Bajo la sospecha de la existencia de una "guardería" donde albergar más cantidad de droga que la preparada para vender
Habida cuenta del modus operandi llevado a cabo por los detenidos a la hora de vender la sustancia estupefaciente, los agentes sospecharon de la posibilidad de que en una de las viviendas existiera algún lugar que albergara una cantidad superior de droga, lo que se conoce en el argot policial como "guardería", con el objetivo tener la droga distribuida en varios lugares y en el caso de ser detenido, no poseer gran cantidad de droga en el momento.
Durante el transcurso de la investigación, los agentes constataron mediante la incautación de varias actas de aprehensión de droga a diferentes clientes que la habrían adquirido a los investigados, la existencia de dicha "guardería", por lo que el siguiente paso y para dar por finalizada las operaciones, solo quedaría la entrada y registro a los inmuebles en cuestión.
Fue a principios de la semana pasada y 72 horas después, cuando culminaron ambas operaciones, procediendo a la entrada y registro de las dos viviendas, procediendo a la detención de los dos varones y la mujer en un primer lugar, para después intervenir un total de 170 grs de cocaína, 565 grs de marihuana y 180 grs de hachís, además de 7.200€ de dinero en efectivo y gran variedad de útiles para la confección de las dosis, como recortes de plástico, papel de aluminio y rollos gastados de papel de aluminio para la elaboración de las dosis, documentos con anotaciones manuscritas, cuchillos con restos de sustancia estupefaciente y una báscula de precisión.
El total de la sustancia estupefaciente intervenida hubiera alcanzado en el mercado ilícito, una vez cortada y vendida un valor próximo a los 5.000€.
Los tres detenidos fueron puestos a disposición de la Autoridad Judicial competente, quien decretó el ingreso en prisión para uno de los hombres.