Agentes de la Policía Nacional han detenido a un varón, de 44 años de edad, por su presunta implicación en la distribución de sustancias estupefacientes en la zona norte de Málaga. Además, su domicilio era utilizado como centro de operaciones, en él preparaba y ocultaba las sustancias, las cuales eran distribuidas de manera itinerante.
Las investigaciones han sido llevadas por agentes de la Comisaría de Distrito Málaga –Oeste, gracias a la cual se ha podido desarticular un punto de venta de droga, concretamente de hachís y cocaína. El inicio de la investigación tiene como punto de partida el propio domicilio del detenido, en el cual se establecieron una serie de vigilancias con el objetivo de confirmar si, efectivamente, era el lugar de ocultación de las sustancias estupefacientes.
Tras la realización de la entrada y registro, los agentes constataron sus sospechas y hallaron 130 gramos de hachís y 16 envoltorios de cocaína -de 6 gramos cada uno-, así como útiles de preparación y dinero en efectivo. Durante el operativo también se produjo la aprehensión de sustancias a los compradores que acudían a la vivienda.
Al detenido se le imputa un delito de tráfico de drogas y ha sido puesto a disposición de la autoridad judicial.
Agentes de la Policía Nacional seguían la pista de ambos hermanos conocedores de su actividad delictiva y de su permanente intención de huida. Ambos habían contribuido al incremento sustancial de robos con violencia con arma blanca y robos en el interior de vehículos, en los alrededores del Jardín Botánico, la presa del Limonero y las fincas rurales cercanas.
11 reclamaciones judiciales en vigor por distintos hechos
Los hermanos, de 22 y 21 años, tras el suceso de las jóvenes del pantano, se escondieron en distintas fincas rurales de la zona, ocuparon viviendas y se dedicaron exclusivamente a salir para cometer los robos; unas veces con el uso de la fuerza en fincas rurales, en otras ocasiones en el interior de vehículos y finalmente contra personas a las que asaltaban por los caminos de tierra. En el momento de su detención sumaban 11 reclamaciones judiciales entre los dos.
El dispositivo de localización por parte de los agentes se dilató en el tiempo debido a las precauciones que tomaban los sospechosos, ya que en el momento que detectaban la presencia policial cambiaban sus rutinas delincuenciales. De hecho, en los últimos tiempos actuaban de noche y en carriles de acceso a pie desde donde tenían más facilidad para su huida.
En alguna ocasión, cuando se vieron acorralados por los agentes, lograron escapar y salir corriendo en plena oscuridad, ya que no dudaban en saltar al vacío para evitar ser detenidos. Tras extremar las medidas policiales y ser localizados ocultos en casa de un familiar, los investigadores pudieron constatar que sus allegados habían establecido labores de vigilancia para darles cobertura.
Finalmente, tras obtener la pertinente entrada y registro, ambos hermanos han sido detenidos por agentes adscritos al grupo de investigación de la Comisaría de Distrito Málaga-Norte. Tras pasar a disposición judicial, el juzgado ha decretado ingreso en prisión para sendos arrestados.