La consejera de Economía, Hacienda y Fondos Europeos, Carolina España; el consejero de Universidad, Investigación e Innovación, José Carlos Gómez Villamandos; y el rector de la Universidad de Málaga, Teodomiro López, han anunciado hoy en la Delegación de la Junta de Andalucía en Málaga un acuerdo para aliviar las necesidades financieras de la institución.
El plan, que contempla un préstamo de hasta 48,5 millones de euros, con un tipo de interés del 1% y un periodo de carencia de 3 años, estará condicionado a la puesta en marcha de un plan de ajuste, cuyo contenido se detallará mañana en un Consejo de Gobierno extraordinario, tal y como adelantó el rector.
Teodomiro López, que durante el acto ha estado acompañado por un numeroso grupo de personas del Equipo de Gobierno, decanos y directores de centro, ha agradecido el apoyo de la Junta de Andalucía y subrayado la importancia de "continuar trabajando de la mano" para avanzar en "una financiación justa, a la altura de una gran universidad". "Hacer frente al préstamo no solo implicará mejorar los ingresos y contener los gastos, sino también la ejecución de proyectos clave para modernizar la universidad y asegurar su sostenibilidad económica a largo plazo", ha añadido.
Villamandos ha destacado la importancia del acuerdo para asegurar que la universidad "pueda resolver su situación financiera y mantener su actividad docente, investigadora y de transferencia con todas las garantías". Además, subrayó que este préstamo permitirá a la UMA empezar a construir un nuevo modelo de gestión "más eficaz y eficiente", en la dirección de "lograr una universidad más sostenible".
Por su parte, Carolina España ha subrayado que este préstamo no solo beneficiará a la UMA, sino que tendrá un impacto positivo en toda la comunidad de Málaga. La consejera aseguró que la Junta de Andalucía continuará respaldando a las universidades públicas, "garantizando siempre la financiación necesaria" para su funcionamiento. "Este préstamo es una solución a un problema financiero que veníamos afrontando", defendió, y que "permitirá a la Universidad de Málaga seguir ofreciendo sus servicios académicos con normalidad, consolidando su labor educativa de manera excelente y asegurando su sostenibilidad a largo plazo".