Miguel Poveda iluminó la inauguración de la séptima edición del festival Marpoética de Marbella. El cantaor catalán, en un concierto peculiar e irrepetible, hizo un repaso a su relación con la poesía, que fue ilustrando con las adaptaciones que ha realizado a lo largo de los años de numerosos poetas y en especial de su predilecto, Federico García Lorca. La charla, que dirigió el dramaturgo Alberto Conejero, sirvió como contexto para entender el proceso creativo de Poveda y la fuerte relación que establece con los textos poéticos. La noche culminó con dos momentos estelares. Por una parte, un avance del 'Poema del Cante Jondo' que el artista ha grabado en los meses previos y que verán la luz el próximo 25 de abril en lo que se presenta como una de las principales novedades musicales de la primavera. Interpretó en concreto el 'Poema de la soleá' en una versión sorprendente junto al guitarrista gaditano Jesús Guerrero. La otra sorpresa de la noche fue la aparición inesperada de la cantaora Carmen Linares. El concierto concluyó con Poveda y ella cantando a dúo desde un palco el clásico 'Verde que te quiero verde'.
La noche, con el Teatro Ciudad de Marbella repleto y un gran ambiente, había arrancado con las intervenciones de la directora general de Cultura, Carmen Díaz, y del director de Marpoética. La responsable municipal explicó que serán 15 días cargados de actividades "en los que tenemos mucho que celebrar y también mucho que agradecer a esos poetas que por momentos se convierten en dioses y nos dejan esos poemas que no importa que estén escritos hace 2.500 años o ayer mismo, porque siempre nos interpelan y nos ensanchan la vida". También detalló que el festival va a recorrer en este periodo diversos espacios de la ciudad como el propio teatro, el Museo del Grabado Español Contemporáneo (MGEC), la Biblioteca Municipal Fernando Alcalá, el Hospital Real de la Misericordia o, incluso, el Puerto Virgen del Carmen. Igualmente, destacó que el proyecto más importante de Marpoética es llevar el espíritu del festival a los colegios e institutos con el fin de que "los más jóvenes sean conscientes del poder del lenguaje poético".
El escritor Javier Vicedo, por su parte, señaló que el festival no es solo un territorio de la poesía como género literario, sino también de lo poético, que según afirmó "es la base de aquello punzante e inexplicable que tiene toda buena obra de arte, lo que subvierte el tiempo". También recordó que el lema de este año procede del poeta francés Bernard Nöel, y dice que 'Escribir es como abrazar un cuerpo que no se ve', algo que por una parte habla de lo inacabado de todo acto creativo pero también de "que la poesía es encuentro, reunión de distintos y distantes". Por último, en la presentación de Poveda, habló Vicedo de la unión inevitable de música y poesía y del trabajo de preparación de un concierto "que difícilmente va a volver a verse en otro lugar".
El acto central de la noche estuvo marcado por la presencia en el escenario de Miguel Poveda y Alberto Conejero. Amigos desde hace años, mostraron una gran complicidad y repasaron vivencias y viajes en torno a la poesía y en especial en torno a la obra de Federico García Lorca, por el que ambos sienten una debilidad especial. "Miguel es capaz de hacer de su propio cuerpo una parte del poema", sentenció Conejero, que describió que el interés por la poesía "nace de la hoguera interior de su curiosidad". Por último, Poveda, antes de encarar su recital, aludió a la importancia que tuvieron Enrique Morente o Juan Habichuela en su decisión de grabar su primer disco con textos de poetas catalanes. En cuanto a Lorca, remarcó que lo considera "un amigo o parte de la familia, con el que me siento muy cercano por su amor por el flamenco y las músicas populares, amante del perseguido y del que sufre".
Tras la inauguración, el festival proseguirá durante el fin de semana con tres espectáculos en los que convergen poesía y teatro. Marpoética, según abunda el propio Conejero, apuesta "por ese teatro tan singular llamado 'teatro de objetos' que, poco a poco, va conquistado los festivales y el corazón de los espectadores porque los objetos que nos rodean, incluso los más humildes e inesperados, son un verdadero depósito de recuerdos y de emociones". Este año se presentan tres obras cuyos creadores son Oligor y Microscopía, David Espinosa y Magda Puig, "verdaderos poetas de los objetos". Las propuestas se podrán disfrutar en diversos espacios de Marbella como el Museo del Grabado Español Contemporáneo, el Hospital Real de la Misericordia y el escenario del Teatro Ciudad de Marbella.