Con la llegada de las vacaciones, son muchas las personas que dejan su domicilio habitual y se desplazan a las zonas turísticas a disfrutar de sus vacaciones, quedando las viviendas temporalmente desocupadas. La Policía Nacional facilita una serie de consejos básicos para prevenir delitos y disfrutar así de unas vacaciones más seguras.
Asegúrese de que las puertas y ventanas de la vivienda quedan perfectamente cerradas. Además cierre siempre la puerta con llave incluso si se va a ausentar del domicilio por un breve espacio de tiempo. No desconecte el timbre y nunca esconda una llave de emergencia en las proximidades de su casa.
Todo lo que en su vivienda transmita apariencia de estar habitada será un seguro de prudencia muy eficaz. No bajar las persianas totalmente, emplear temporizadores automáticos para encender y apagar luces o un aparato de radio pueden ayudar a aparentar que la casa no está vacía.
No deje en su domicilio objetos de elevado valor, llaves de vehículos, documentos importantes, talonarios de cheques, claves tarjetas de crédito o códigos de acceso a banca on line. Si tiene la posibilidad, guárdelos en una caja de seguridad.
Elabore un inventario con los números de serie de aparatos electrónicos, marca y modelo. Incluya también descripción y/o fotografías que permitan la identificación de joyas y objetos valor.
No haga públicos sus planes de veraneo. Tenga especial cuidado si utiliza redes sociales e informe a sus hijos de que no aporten datos personales ni sobre las vacaciones a desconocidos o en la red.
Pídale a alguien de confianza que recoja el correo de su buzón y realice visitas periódicas.
Una pequeña inversión puede mejorar la seguridad de su vivienda, como cambiar el bombín de la cerradura por otro con certificado de calidad, poner cerrojos en las ventanas correderas, rejas en las ventanas inferiores, iluminación en la entrada o instalar una mirilla electrónica.
Revise las puertas de su vivienda y la de sus vecinos para detectar señuelos que los delincuentes utilizan para detectar qué pisos se encuentran vacíos. Existen diversas modalidades de estas marcas: un hilo de pegamento o silicona, una pequeña tira de plástico o cartulina. La finalidad es siempre la misma: al abrir la puerta se romperá el hilo de pegamento o se caerá la tira de plástico. Así los ladrones, con tan solo un vistazo, saben en qué viviendas no hay nadie en su interior.
Estos señuelos suelen ponerse en aquellas zonas de la puerta que quedan fuera del campo de visión, como por ejemplo en la parte inferior del marco.
Ante cualquier síntoma sospechoso, (gente merodeando en las inmediaciones, ruidos en viviendas desocupadas, mirillas manchadas, testigos en las puertas), llame a la Policía.
Si ve la puerta de su domicilio abierta o una ventana rota, no entre y llame a la Policía.
Si observas gente extraña o en actitud vigilante en el portal o merodeando por la calle.
Si escuchas ruidos en viviendas desocupadas.
Ante cualquier síntoma que te haga presumir la comisión de un hecho delictivo en tu vivienda o en la de tus vecinos, ponte en contacto con la Policía en el 091.