La Concejalía de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Gijón ha iniciado las obras de recuperación de un singular conjunto de estructuras históricas en la popular senda costera del Cervigón. Estas marcas, utilizadas hace décadas para la navegación marítima y para la realización de pruebas de velocidad de navíos, han sido deterioradas por el paso del tiempo y recibirán una intervención integral para restaurarlas y ponerlas en valor.
El proyecto, liderado por el Servicio de Parques y Jardines, no solo restaurará las marcas en su entorno original, sino que también incluirá la instalación de paneles explicativos para dar a conocer la historia y utilidad de estas estructuras, contribuyendo a la conservación de parte del patrimonio naval de Gijón. Además, se creará un sendero accesible con una zona de descanso que ofrecerá vistas panorámicas al mar y el paisaje circundante.
El concejal de Medio Ambiente y Sostenibilidad, Rodrigo Pintueles, ha destacado que "esta actuación es un paso más en nuestro compromiso por recuperar y poner en valor los elementos que forman parte de la historia de Gijón y de su relación con el mar. La senda del Cervigón es un lugar emblemático que ahora, además de su belleza natural, ofrecerá a los visitantes una nueva perspectiva sobre el patrimonio marítimo y la tradición naval de nuestra ciudad". "Con esta recuperación, Gijón no solo preserva su historia marítima, sino que también ofrece a sus visitantes y residentes una nueva forma de disfrutar de su patrimonio natural y cultural", añadió.
La intervención, que durará unos dos meses y medio, se llevará a cabo sin afectar al tránsito de la senda, salvo en algunos momentos puntuales. El proyecto, con un presupuesto de 35.734,01€, está financiado por la Unión Europea a través de los fondos Next-Generation EU, y forma parte de las acciones del Plan de Sostenibilidad Turística en Destino (PSDT) en colaboración con la Consejería de Presidencia, Reto Demográfico, Igualdad y Turismo del Principado de Asturias.
La senda del Cervigón, que comienza en la playa del mismo nombre y se extiende hasta la Ñora, es una de las rutas más frecuentadas por locales y turistas. Ahora, con esta actuación, se añadirá un atractivo cultural e histórico adicional. En particular, se trabajará en las estructuras de hormigón cercanas a la Casa de Rosario Acuña, un emblemático edificio que ha sido recientemente restaurado y que verá mejorado su entorno.
Gracias a las investigaciones realizadas por técnicos municipales en colaboración con el Centro Integrado de Formación Profesional del Mar y el Colegio de Ingenieros Navales, se ha podido recuperar información sobre la utilidad de estas marcas de navegación, así como localizar una pareja más de estructuras metálicas cerca de la playa de Serín. Junto a otra pareja en Quintes, estas marcas ayudaban a realizar las pruebas de navegación de los buques hace más de 50 años, aunque actualmente están parcialmente ocultas por la vegetación.