Recientemente hemos visto en las noticias como los alumnos españoles bajan en ciencias y matemáticas agrandándose la diferencia entre sus homólogos europeos. Las matemáticas, popularmente, son una asignatura a la que muchos niños tienen miedo y que más dificultades representa para muchos de estos. No en vano, la gran mayoría de clases de refuerzo que los jóvenes españoles llevan a cabo guardan relación con las matemáticas.
Entender la razón de estos problemas es una de las claves para evitar el fracaso en las matemáticas. Hoy vamos a ver algunos de los motivos por los cuales las matemáticas cuestan tanto y, por lo tanto, tratar de poner freno a las dificultades que representa una de las asignaturas más importantes de toda la enseñanza.
Factores pedagógicos
A pesar de que en la gran mayoría de los casos es el alumno el que se encuentra en el centro del fracaso escolar, lo cierto es que no siempre es así. Esto se debe a ciertos factores pedagógicos que nos explican que, en ocasiones, es el sistema el que falla. A diferencia de otras asignaturas, la enseñanza de las matemáticas es algo más abstracta.
Esto sirve para abordar uno de los problemas principales que tiene esta asignatura, la dificultad de relacionarlas con la vida real. A pesar de que la base matemática sí que es fácil de mostrar, por ejemplo, mediante sumas y restas contando toda clase de objetos, el problema se produce a la hora de explicar conceptos más abstractos como puede ser una derivada o un logaritmo neperiano.
Los profesores deben tratar de adaptar la enseñanza a un estilo de aprendizaje particular para que el alumno tenga menos problemas a la hora de enfrentarse a estos conceptos. El esfuerzo por parte del profesor es más importante en esta materia ya que no se puede limitar a explicar la teoría sin más, ya que la parte práctica es fundamental en este sentido.
Factores psicológicos
Cuando se trata de una asignatura abstracta como las matemáticas o que presenta más dificultades de entender en un primer momento es mucho más fácil que aparezca la falta de interés. Al no encontrar una aplicación práctica como tal, los estudiantes pueden verse desmotivados a aprender una asignatura en la que no entienden qué beneficios puede reportarlos a corto plazo.
Otro factor psicológico importante es el conocido como "ansiedad matemática". El miedo al fracaso o la presión por obtener buenas notas en matemáticas puede generar una ansiedad en el alumno que termina por bloquearle su capacidad de razonamiento, algo fundamental cuando se trata de aprender reglas matemáticas. Que se dificulte en este sentido la resolución de problemas explica de forma clara las dificultades a las que se enfrenta esta materia.
Factores sociales
Finalmente, los factores sociales. Uno de los más importantes son las expectativas familiares. Los niños pueden verse presionados por sus padres u otros familiares al tratar de cumplir las expectativas que estos tienen depositadas en su hijo en relación a las matemáticas. Si sienten que la asignatura les cuesta, que no la entienden bien o que presentan cualquier tipo de problema, pueden verse bloqueados debido a este tipo de presión.
Así mismo, otro factor social se produce cuando se compara directamente con otros niños. Mientras que para algunos niños las matemáticas son un problema, otros encuentran especialmente sencilla esta asignatura. La comparación con estos compañeros puede generar un sentimiento de inferioridad que afecta a la autoestima y, a la larga, provoca el abandono por completo de las matemáticas.
¿Existen soluciones?
De la misma forma que hay muchos problemas con las matemáticas, también hay muchas soluciones que se pueden llevar a cabo. Además de las clásicas clases particulares que sirvan como refuerzo o apoyo, se debe fomentar la motivación a la hora de aprender matemáticas.
Hacer que las matemáticas sean algo más divertido o tratar de buscar la práctica en todo momento puede ayudar a la hora de enseñar matemáticas. En el caso de que haya problemas psicológicos siempre se debe crear un ambiente positivo mostrando apoyo emocional, ya que no solo tendrá su efecto en las matemáticas, sino en el aprendizaje en general.