El Fondo Perea-Borobio ha donado a la Universidad de Sevilla parte de la mayor colección de microscopios antiguos considerados como instrumentos científicos de Europa. Consta de cuarenta microscopios fabricados entre los años 1760 y 1945, y recopilados durante cuarenta años por dos médicos, microbiólogos y profesores de la Universidad de Sevilla, Evelio José Perea Pérez y María Victoria Borobio Enciso. El rector, Miguel Ángel Castro, ha avanzado que el futuro museo de la Universidad de Sevilla, que en estos momentos se encuentra en proyecto, acogerá esta colección.
El conjunto donado a la Universidad forma parte de una colección más amplia formada por 200 piezas, en la que están integrados los principales modelos y fabricantes europeos y que ayuda a realizar un recorrido histórico por la evolución de este instrumental. Algunos de estos modelos fueron utilizados por los grandes científicos de la historia como Darwin, Pasteur, Virchow, Withering, Ramon y Cajal, entre otros.
El origen de las piezas se reparte entre Europa, Canadá y Estados Unidos y fueron diseñados por 66 fabricantes diferentes. Estas piezas de instrumental científico, microscopios e instrumentos auxiliares, donadas a la Universidad están valoradas en más de 20 000 euros, teniendo en cuenta su estado de uso y conservación, así como la condición histórica o documental de alguno de sus elementos. Otra parte de este fondo irá a parar a la Real Academia Nacional de Medicina en Madrid y al Museo Nacional de Ciencias de Madrid.
"Pequeñas máquinas maravillosas"
El matrimonio, fascinado por "estas pequeñas máquinas maravillosas, de mecánica precisa y diseño ingenioso y elegante" comenzó la búsqueda de antiguos modelos de microscopios, con el foco puesto en aquellos que se empleaban en ciencias, y especialmente en la medicina. Para ello, participaron en numerosas subastas para la adquisición de nuevos modelos, con la única limitación económica del costo, a veces astronómico de algunos microscopios.
"La premura por encontrar hermosas piezas para la colección y la incertidumbre de volverlas a encontrar, si dejábamos escapar la oportunidad, formaron parte de esta aventura", asegura Evelio Perea. Para el profesor, "la colaboración con la Universidad de Sevilla debe continuar y estoy a disposición, pues me quedan microscopios por donar y quisiera seguir en contacto con el alma mater, donde tuve el honor y el placer de trabajar. Para mí es un día muy feliz". Por su parte, el rector, Miguel Ángel Castro, ha agradecido profundamente al matrimonio la donación que entronca con el compromiso de la Universidad de conservar el patrimonio y mostrar la cultura como eje central.