La actuación policial, desarrollada días atrás, tuvo lugar sobre las 2 de la madrugada, y se inició tras una llamada de
alerta al teléfono de emergencias 091 de la Policía Nacional por parte del propio recepcionista del hotel, quien, a través de las cámaras de seguridad del establecimiento, observó a los posteriormente detenidos forzar la puerta de entrada, penetrar en el comercio y sustraer la máquina de café automática, valorada en más de 3.000 euros.