Una operación conjunta de gran envergadura, resultado de 18 meses de trabajo intenso por parte de las autoridades policiales, coordinada por Europol y liderada por las autoridades españolas y portuguesas, quienes han tenido que desentrañar un entramado criminal con conexiones internacionales, especialmente dentro de la Unión Europea, y que ha dado lugar a la desarticulación de una organización criminal especializada en el contrabando de tabaco, que operaba con una infraestructura altamente sofisticada.